El proyecto interminable (La Opinión)

La ordenación urbanística de la plataforma de San Andrés, donde irá el auditorio de música, sigue bloqueada a la espera de una salida definitiva
El Plan Especial del Puerto ha sido, durante muchos años, un claro ejemplo del síndrome de Penélope. Ésta era la mujer de Ulises, que durante 20 años estuvo perdido por los dioses y no podía llegar a Ítaca, su casa. Su esposa, presionada por los pretendientes, prometió casarse cuando terminara de bordar un tapiz que confeccionaba todos los días. Sin embargo, por la noche deshacía lo que había tejido esa jornada. El Plan del Puerto era ese tapiz que se hacía y deshacía constantemente. No fueron 20 años, pero sí ocho los sufridos para desbloquear las obras de los muelles 1 y 2, ahora en marcha. Sin embargo, parece que Penélope amenaza con volver, en este caso, con los flecos que quedan por decidir del Plan, como el auditorio de música en la plataforma de San Andrés.

1. Urbanismo

La Gerencia Municipal de Urbanismo lleva desde hace meses tramitando la reordenación de la plataforma de San Andrés. El acuerdo para que vaya el auditorio de música obligaba a cambiar la ordenación urbanística de la zona, donde iba suelo comercial. Sin embargo parece que se ha encasquillado este trámite pese al acuerdo previo que había. ¿Cuál es el problema? El Ayuntamiento decidió unificar en esta modificación todos los aspectos que estaban pendientes de ordenar del Puerto de Málaga. Así, a una reforma puntual sobre la plataforma, se unió el destino del solar que hay en el dique de Levante, junto a la estación de cruceros; definir cómo se integrará el tren de mercancías con los nuevos usos, dónde irá la entrada de los camiones de mercancías por San Andrés o el nuevo puerto deportivo, entre otros temas.Tanta unión de temas ha tenido como principal virtud retrasar toda la modificación e iniciar una larga ronda de encuentros para consensuar todos los temas.

2. Solución

Parece que el Ayuntamiento y el Puerto se encuentran a punto de encontrar una salida a todos los aspectos que se van a modificar. Algunos acuerdos, sin embargo, han sido precedidos de discusiones de poca trascendencia, salvo para consumir tiempo. La salida de la vía al previsto soterramiento ha tenido entretenidos a los técnicos, aunque con la simple lógica de la ingeniería, con las pendientes y el radio de curva obligado por una infraestructura de estas características. El uso hotelero que iba en el dique de Levante, propuesto inicialmente por el Ayuntamiento y también vetado por ellos, obligó a cambiar el enfoque de los temas. Iba para escultura de Picasso y se quedará en edificio de uso portuario.

3. Las obras

Mientras la discusión en los despachos de Urbanismo y de la Autoridad Portuaria continúa consumiendo semanas para desbloquear todos los proyectos pendientes, las obras en el muelle 1, donde irá la zona comercial y de restauración, avanzan a buen ritmo y comienzan los primeros trabajos para construir el aparcamiento subterráneo proyectado, con 900 plazas.No ocurre lo mismo con las obras del muelle 2, donde irá el Palmeral de las Sorpresas. Los trabajos comenzaron en 2007 y se han paralizado por la inestabilidad del terreno. Al estar construido sobre una superficie de relleno, el inmueble que acogerá el Museo del Puerto allí previsto lleva tres meses de retraso a la espera de reforzar su estructura para conseguir una mayor consolidación. Eso llevará su inauguración a los primeros meses de 2009, pese a que estaba prevista para finales de 2008.