sábado, 25 de octubre de 2008

Los árboles y el tráfico, claves para el paso del trazado bajo la Alameda (La Opinión)


Este tramo del trazado es fundamental para el diseño de toda la línea. La obra se dividirá en dos fases, del Guadalmedina a la Marina y hasta La Malagueta
M. FERRARY. MÁLAGA Ω Hay dos palabras que aparecen en la mente de todo malagueño cuando empieza a pensar en las obras del metro por la Alameda Principal y el Parque: árboles y tráfico. Esta preocupación ha sido recogida en las exigencias que Ferrocarriles Andaluces realiza a las empresas que quieran redactar el proyecto del tramo más complejo de la línea de metro de Málaga.Los cerca de 1.600 metros de túnel que hay entre la glorieta de Albert Camús y la estación de La Malagueta (en el paseo de Reding) se han convertido en fundamentales para el destino y diseño definitivo del metro en Málaga. A nadie se le escapa que construir un túnel bajo el carril central de la Alameda tiene una complicación obvia, que es mantener la integridad de los grandes ficus que la pueblan. Para ello, la Junta exige unos estudios sobre los posibles efectos de la obra en estos ejemplares y un plan de conservación y seguimiento de los árboles, incluso tras el final de la obra.El problema principal aparece con la elección del sistema elegido para construir el túnel. La tuneladora está descartada y hay que elegir cómo hacer los muros-pantalla. No obstante eso supone empezar desde la superficie, nada de pasar por debajo de la Alameda, plaza de la Marina y Parque como si nada.Así que las plantas van a sufrir, aunque queda por saber cuánto. Como va a verse muy alterado el tráfico, Ferrocarriles Andaluces exige un plan de tráfico detallado y acordado con el Ayuntamiento, para evitar problemas similares a los vividos en la Carretera de Cádiz.Dos fases. Pero si algo llama la atención en las condiciones de este contrato es la posibilidad de abrir este tramo en dos fases. Así, pide a las empresas que ofrezcan la alternativa de dividir la obra en dos partes independiente. La primera sería entre la estación del Guadalmedina y la plaza de la Marina, que entraría antes en servicio al conectarse con el resto de la red. La última fase sería entre este punto y La Malagueta, que la Junta deja con la puerta abierta a que se pueda tardar más en su ejecución.Esto implica que, en un futuro, se plantee que el metro termine en la plaza de la Marina mientras se construye el delicado túnel bajo el Parque. Eso sí, también hay que resolver cómo se excava bajo el aparcamiento subterráneo sin romper esta estructura.

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