El Consistorio se encarga de elaborar el proyecto y no cobra la licencia, lo que ayuda a los núcleos residenciales a mejorar sus infraestructuras
19.07.2010 -
La urbanización Guadalmina Alta ha incluido en su convenio cinco marcos de colaboración. ::JOSELE-LANZA
Firmes deteriorados, redes de pluviales desfasadas, aceras levantadas y señales viales casi imperceptibles. Estas son algunas de las deficiencias con las que conviven desde hace años los ciudadanos de algunas urbanizaciones de Marbella, fruto de su antigüedad o de las negligentes actuaciones de los promotores urbanísticos que se auspiciaron en el caos reinante en la 'era Gil'. Para paliar estos desperfectos, el Ayuntamiento ofrece a los núcleos residenciales un convenio de colaboración por el cuál quedan eximidos de abonar la licencia y, además, son los técnicos municipales los que se encargan de elaborar el proyecto; una ayuda a la que las comunidades de propietarios se están aferrando.
De esta manera, en virtud al marco de colaboración que se abrió a principios de 2008, son 34 las urbanizaciones que se han adherido a este plan hasta el momento, un número que seguirá en aumento dadas las solicitudes que llegan a el Área de Urbanizaciones.
«Las peticiones por parte de los núcleos residenciales son continuas, pese a que la crisis afecta al bolsillo de los propietarios, que son quienes financian las obras. Queremos que todas las urbanizaciones de la ciudad conozcan esta herramienta jurídica, a la que pensamos se acogerán durante la presente legislatura el 15% de las 400 existentes en Marbella», explicó el director del Área de Urbanizaciones, Javier García.
Alivio para el presupuesto
Este marco de colaboración supone un alivio para los presupuestos de las obras, ya que hasta el momento las urbanizaciones se han ahorrado 130.000 euros de la redacción del proyecto y la licencia de obras. En total, la cuantía de las obras solicitadas por las 34 comunidades de vecinos adheridas al marco de colaboración, asciende a 4.107.213 euros.
Las infraestructuras más solicitadas de este plan de mejora es el asfaltado del firme, actuación que se acometerá en todas las urbanizaciones adheridas. De lejos le siguen las actuaciones de saneamientos, pluviales y redes de electricidad y telefonía. Las acometidas que menos se realizan son las de acerado, red de agua y de gas. Además de todo esto, se realizan tareas de señalización vial en las urbanizaciones que lo solicitan, pero sólo en el caso de actuaciones conjuntas en las que se incluye un anexo, pero hasta el momento no es posible asesorar en esta materia de manera exclusiva.
«Estamos elaborando el instrumento jurídico que nos permita ayudar a las urbanizaciones cuando nos soliciten estudios de seguridad vial. Se encuentra en proceso de redacción para que sea posteriormente aprobado en Junta de Gobierno», asegura García.
Una de las urbanizaciones que más ha aprovechado el convenio de colaboración es Guadalmina Alta, que ha incluido en su proyecto cinco marcos de colaboración, cuyas obras se están ejecutando en la actualidad. El otro núcleo residencial que se encuentra en plena acometida es Marqués de Duero, con la remodelación del acerado de sus calles. El resto de marcos de colaboración se encuentran pendientes de pasar los sucesivos trámites.
Tramitación
Cuatro urbanizaciones han presentado solicitud de adhesión al marco de colaboración con una copia de la aprobación del acuerdo adoptado por la comunidad de propietarios con las actuaciones a seguir y el compromiso de éstos a sufragar los gastos económicos de la obra; y esperan la aprobación de la Junta de Gobierno Local. Otras tres están a la espera de la redacción del proyecto por parte de los técnicos del área municipal, once urbanizaciones ya cuentan con él y están pendientes de ejecución y cuatro ya han finalizado. Pero no todas han llegado a buen puerto, pues tres proyectos han sido desestimados y otros tantos fueron abandonados por los propietarios, que no podían hacerse cargo del presupuesto.
Esta herramienta jurídica, que sigue disponible para todas las urbanizaciones que lo requieran, parece haber dejado satisfechas a las que ya han terminado sus obras, como es el caso de Rocío de Nagüeles, cuya asociación de propietarios solicitó el pasado mes de junio un segundo marco de colaboración, éste para la construcción de unas rotondas que mejoren su tráfico.
«Queremos que este marco de colaboración sea un medio al que se acojan las 400 urbanizaciones que existen en la ciudad desde Cabopino a Guadalmina para mejorar la calidad de los servicios y la estética de sus calles», apunta García.
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