El Ayuntamiento y la Junta han dejado de discutir a falta de elementos para el proyecto
JAVIER GARCÍA RECIO. MÁLAGA La idea de convertir el Benítez en un gran parque para el disfrute de los ciudadanos la lanzó la candidata a la alcaldía María Gámez. Poco después el ministro de Fomento aprovechó su presencia en un mitin celebrado el 24 de octubre para anunciar que su ministerio se comprometía con la construcción de un gran parque metropolitano en los suelos del Benítez. Todo se dispuso para una reunión a tren bandas en la sede de la Subdelegación del Gobierno el 15 de noviembre.
A partir de ahí, y a la espera del proyecto de convenio, el Ayuntamiento y la Junta se enredaron en una disputa sobre la naturaleza del parque –si debía ser urbano o metropolitano– y quién debía financiar su ejecución y posteriormente su mantenimiento. El alcalde de Málaga argumentó que el parque tenía condición de periurbano, por lo que su mantenimiento correspondía a la Junta. La delegada del Gobierno, María Gámez, le reprochó su falta de colaboración y su disposición al «conflicto permanente».
Pero incluso esta agria pelea ha ido perdiendo sentido y fuerza. El incumplimiento de los compromisos del Ministerio ha conseguido diluir incluso la polémica entre la Junta y el Ayuntamiento por falta de elementos concretos sobre los que discutir.
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