El Ayuntamiento retoma el proyecto del quiosco en la Alcazaba (La Opinión)

El proyecto original recibió el rechazo de la Junta por ser una estructura estable, por lo que ahora es desmontable

Miguel Ferrary 17.09.2013 | 05:00

La Alcazaba tendrá un pequeño bar en su interior. Gregorio Torres

El Ayuntamiento ha retomado la idea de construir un quiosco-bar en el interior de la Alcazaba, tras el rechazo de la Consejería de Cultura en 2012 de un proyecto anterior. El consejo de administración de la Gerencia Municipal de Urbanismo estudiará mañana esta propuesta para su aprobación, con idea de sacar un concurso de construcción y concesión de la nueva estructura, que ahora será desmontable para lograr la aprobación de la Consejería.

El proyecto tiene un presupuesto de 36.600 euros y un plazo de ejecución de tres meses y apenas tendría impacto en el monumento, al ser totalmente desmontable.

Este proyecto cambia el criterio respecto al intento de hace un año, cuando el proyecto presentado, y retirado por la falta de autorización de Cultura, incluía una parte de obra con estructura de hormigón.

No obstante, el grupo municipal de IU no aprobará el proyecto hasta conocerlo en profundidad, por lo que han pedido consultar el expediente completo. Además, los ediles de IU insisten en que estarán muy vigilantes «para que esta obra y esta nueva edificación no afecte a un Bien de Interés Cultural como la Alcazaba», aseguró un portavoz.

Entre los temas que se verán en el consejo de administración de Urbanismo se encuentra la aprobación de la licencia de obra para la construcción de un edificio de apartamentos turísticos en la calle Tomás de Heredia, en los solares ocupados por los números 22 y 24, bajo el nombre comercial Oficentro Suites II.

También se aprobará la modificación de la ordenanza que regula la Inspección Técnica de Edificios (ITE), que se adapta al decreto ley del Gobierno y que afectará al número de edificios a inspeccionar en este año, al reducir la horquilla de edificios afectados.

Así, la ordenanza municipal hasta ahora vigente obligaba a inspeccionar este año unas 17.000 viviendas, pero con la nueva normativa estatal no llegarán a 4.000, ya que sólo tienen que pasar la inspección este año los edificios construidos entre 1957 y 1962.