El Consistorio invertirá más de un millón en un puente que unirá San Pedro y Nueva Andalucía (SUR)

La alcaldesa confía en que esta actuación, que recoge el nuevo PGOU, esté concluida en un año y medio Se trata de una añeja reivindicación de los vecinos para conectar ambas zonas y aliviar el tráfico de la A-7

ACTUACIÓN

Paso provisional
Ubicación: Sobre el río Guadaiza y conecta San Pedro Alcántara y Nueva Andalucía, a la altura del Camino del Potril.
Presupuesto de licitación de la obra: Cerca de 100.000 euros.
Adjudicación: Por algo más de 90.000 euros a la empresa Trigemer.
Características: Paso provisional para el tránsito de vehículos. Consta de dos carriles para cada sentido, de 3,50 metros cada uno. Salva la distancia de 27 metros existente entre las márgenes de encauzamiento del río.

Puente definitivo
Ubicación: En las inmediaciones del paso provisional.
Presupuesto: Más de un millón.Ejecución: Prevista dentro de un año y medio, ya que, depende de que se apruebe el nuevo PGOU.

El equipo de gobierno municipal quiere impulsar una añeja actuación que acumula casi once años de retraso: la construcción de un puente que conecte el polígono industrial de San Pedro Alcántara -en plena expansión- con el núcleo urbano de Nueva Andalucía. La alcaldesa Ángeles Muñoz así lo avanzó durante la inauguración de un paso provisional que se ha creado sobre el río Guadaiza para enlazar ambos núcleos urbanos, a la altura del Camino del Potril. Según detalló la regidora marbellí, invertirán más de un millón de euros en este proyecto más ambicioso, demandado como agua de mayo por los ciudadanos. Y es que numerosos conductores utilizan desde hace años para desplazarse desde la localidad sampedreña a Nueva Andalucía y viceversa el paso sin acondicionar a través del lecho del río que había entre la zona de La Campana y el Camino del Potril, evitando así el tránsito por el cruce semafórico de la carretera de Ronda que registra un tráfico intenso. Pablo Moro, concejal delegado de Obras e Infraestructuras, explicó que la intención del equipo de gobierno es impulsar esta actuación para que «en el próximo año y medio esté ejecutada y lista para utilizar». Esta infraestructura definitiva se ubicará en las inmediaciones del nuevo paso provisional, recién inaugurado. «Mi intención es que pudiera seguir utilizándose los dos: el provisional y el definitivo, que se acometería a una distancia provisional», subrayó el máximo responsable municipal de Obras. Los plazos de ejecución de esta obra dependerían de la aprobación definitiva del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad, en tramitación. «Se tendrá que realizar algún tipo de expropiación de suelo y por lo tanto, llevará más tiempo poder efectuarla», puntualizó la primer edil marbellí.

Alternativa

Mientras tanto, el nuevo paso provisional servirá de desahogo al caos circulatorio de la antigua nacional 340 y supondrá, en opinión del equipo de gobierno municipal, una alternativa factible a los residentes de la zona cuando arranque el grueso de las obras del soterramiento de la A-7 a la altura de San Pedro. No obstante, desde la Delegación de Obras, se insiste en que al tratarse de un paso desbordable y no de un puente, no podrá ser utilizado cuando llueva de forma intensa «ante el peligro de desbordamiento». Además, el edil de Obras alertó a los conductores de la necesidad de que circulen por él con mucha precaución, ya que, al ser desbordable, la ley impide la instalación de protecciones en los laterales. «Es un paso de vehículos y si los peatones cruzan por él tendrán que tener toda la cautela y saber que no está habilitado para ellos», sentenció Moro. La velocidad máxima está limitada a 20 kilómetros por hora, según consta en las señales de circulación instaladas en cada sentido, mientras que por el carril del Potril sólo se autoriza el tránsito de vehículos de hasta seis toneladas debido a la estrechez de la vía. Sin embargo, el gobierno municipal está redactando el proyecto para ampliar el ancho de dicho carril ante la previsible afluencia de vehículos. En este sentido, el concejal Pablo Moro avanzó que «en los próximos días, podremos ponerlo en marcha».La alcaldesa mostró su satisfacción por la ejecución de la «primera obra importante realizada de principio a fin por el equipo de gobierno» y que atiende a una reivindicación ciudadana con la que se pone fin al peligro que suponía el cruce descontrolado de vehículos a través del lecho del río. El presupuesto de licitación de esta actuación casi rozó los 100.000 euros, pero se adjudicó por algo más de 90.000 euros a la empresa Trigemer. Este paso sólido está constituido por doce tubos de hormigón de un metro y medio de diámetro, que salva la distancia de 27 metros existentes entre las márgenes de encauzamiento del río Guadaiza. Cuenta con dos carriles, para ambos sentidos, de 3,50 metros de anchura cada uno. Desde ayer, está abierto al tráfico.