El Ayuntamiento endurece los trámites para las ayudas a la rehabilitación del Centro (SUR)

Las peticiones de promotores y comunidades de vecinos serán seleccionadas por un sistema de puntos IU alegará contra la nueva ordenanza por su arbitrariedad

Solicitar una subvención al Ayuntamiento para un proyecto de rehabilitación en el Centro Histórico será más complicado dentro de pocos meses. El pleno municipal que se celebra mañana tiene previsto aprobar una nueva ordenanza para regular las ayudas que concede la Oficina Municipal de Rehabilitación que supondrá un cambio radical en la manera de funcionar de este organismo. Hasta el momento, esta oficina concedía las subvenciones, previo informe técnico, contra el presupuesto, es decir, por orden de llegada de los solicitantes y hasta agotar los fondos previstos. Con la nueva normativa, el Consistorio tendrá que efectuar una convocatoria específica con un plazo de presentación de solicitudes, por lo que los aspirantes a las ayudas -promotores y comunidades de propietarios en su mayor parte- deberán competir para obtenerlas.Este cambio ha sido propiciado por una enmienda a la totalidad de la nueva ordenanza que fue presentada por el portavoz de IU, Pedro Moreno Brenes. A raíz de sus indicaciones sobre el incumplimiento de las leyes que regulan la concesión de subvenciones que suponía el anterior texto de la norma, el equipo de gobierno decidió volver a tramitarla para introducir algunas modificaciones.De este modo, la convocatoria de ayudas a la rehabilitación del Centro recogerá el importe máximo a otorgar, el plazo de presentación de solicitudes y el plazo de su resolución. Además, los que quieran acceder a las subvenciones, en el caso de que el coste total de la obra supere los 30.000 euros, deberán demostrar que han solicitado presupuesto a tres empresas homologadas antes de elegir a una de ellas.

Valoración

Para establecer un orden de prioridad de las peticiones en cada convocatoria, la ordenanza contempla un sistema de puntos que valorará el emplazamiento del edificio, su protección urbanística, que tenga pinturas de siglos pasados en su fachada, que se incluyan en la reforma los bajos comerciales, y que englobe un mayor número de edificios, en el caso de las ayudas a la reparación de barriadas, entre otras cuestiones.Además, la norma prevé la creación de un órgano colegiado que estudiará si se concede o no la subvención. Pese a estos cambios, Moreno Brenes anunció que va a presentar más alegaciones a la ordenanza, entre otras cuestiones porque el citado órgano colegiado se compone de miembros de la propia Oficina de Rehabilitación, lo que, a su juicio, le resta independencia y objetividad a la hora de autorizar las ayudas. «Todavía se ha dejado cierto margen en algunas cuestiones que puede derivar en la arbitrariedad», afirmó el portavoz de Izquierda Unida.