PRINCESA SÁNCHEZ. MARBELLA Las tuberías de saneamiento o colectores que ocupan las playas de la Costa del Sol pasarán pronto a la historia. Un proyecto financiado por el Ministerio de Medio Ambiente y elaborado por la empresa mancomunada de suministro de agua Acosol prevé sacar estas infraestructuras del dominio marítimo-terrestre para evitar su impacto visual y, sobre todo, los vertidos que arrojan cuando registran averías.
La actuación supera los 60 millones de euros de inversión y se divide en tres tramos que afectarán fundamentalmente a los litorales de Estepona, Fuengirola y Marbella, indicó a este diario la propia desarrolladora del proyecto, Acosol. "Se sustituirán aquellas tuberías que estén mas deterioradas", indicaron. Cabe recordar que buena parte de ellas datan de la década de los 70.
Los tramos, además de deteriorados, se han visto afectados por la masificación urbanística de la zona. "Hay construcciones encima de los colectores", indicaron. Una situación que se pretende modificar con esta medida, que les dotará de un nuevo trazado precisamente en estas áreas de playa.
La Junta de Andalucía ya ha recibido el dinero por parte del Ministerio para iniciar las obras, tal y como adelantaron las citadas fuentes, pero éstas aun están pendientes de licitación. Un trámite que se espera concluir antes de que finalice el año, aunque el calendario se mantiene abierto.
El saneamiento integral de la Costa del Sol es una de las grandes asignaturas pendientes de las administraciones públicas. Esta actuación supondría un importante paso, pero no el definitivo, ya que buena parte de los problemas de esta materia proceden de las redes municipales. Estos equipamientos no separan en su mayoría aguas residuales de fluviales.
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