Nuevos inconvenientes lastran los suelos reservados al macrohospital. El PSOE pide que Limasa pare la obra de su nueva sede en la zona y busque un emplazamiento alternativo para guardar los camiones de la basura
25.05.2010 -
Al primer paciente del futuro macrohospital -el suelo- no dejan de salirle achaques que van a requerir una revisión en profundidad de su estado de salud. A primera vista no parece del todo muy bueno. A la convivencia con la nueva cochera de los camiones de basura de Limasa, como ya adelantó este periódico (SUR 16/4/2010), se suma la presencia de un arroyo, de una zona en la que existen restos arqueológicos que impiden constuir y los inconvenientes de situarse junto a lo que fue el antiguo vertedero de la ciudad que, aunque ya lleva más de una década clausurado, extiende su huella en el subsuelo, como ha quedado de manifiesto en las obras de la nueva sede de Limasa que se realizan desde principios de año.
Según fuentes consultadas, la empresa de limpieza de la ciudad se ha encontrado con la sorpresa de tener que sanear parte de los suelos en los que tiene previsto levantar un edificio de oficinas al que se trasladarán las existentes en la zona de La Térmica. El motivo: la aparición de estratos del cercano vertedero clausurado. «Si han aparecido en este punto puede que también estén bajo la zona de desguaces que también ocupará el macrohospital», comentaron.
Así, sobre el proyecto para concentrar todos los servicios de Carlos Haya se cierne la incógnita de establecerse en unos terrenos que pueden albergar gases y restos de las basuras de la ciudad depositadas allí hace más de una década, lo que requerirá el correspondiente tratamiento medioambiental. Así lo va a hacer el Consistorio con algunas partes del vertedero clausurado para preparar su conversión en un parque.
Restos arqueológicos
Por otro lado, y al margen de la presencia del arroyo Merino, que divide la parcela en dos, lo que condicionará su ordenación, también tiene el incoveniente de no poder ocuparse al cien por cien en su zona norte por la presencia de unos restos arqueológicos que obligaron a Limasa a descartar el solar que reservó en primer lugar para su nueva sede central. Según las fuentes, en este sector de hallazgos arqueológicos hay una parte en la que ya está claro que no se puede edificar y otra que necesitaría una especial vigilancia.
Por otra parte, como ya informó SUR, Limasa ha optado por modificar su proyecto y renunciar a unos 24.000 metros cuadrados en los que tenía previsto ubicar 223 estacionamientos para camiones de basura que invadían los suelos dibujados para el macrohospital. A la espera de que este proyecto del Gobierno andaluz empiece a materializarse, ocupará provisionalmente esta zona dotándola de un pavimento de grava. La solución final será trasladar estos aparcamientos a unas pacelas situadas un poco más al norte que, no obstante, requieren de la aprobación del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para su ocupación. Más arriba, se trasladarán los desguaces de vehículos que hay en el lugar.
Esta variación en el proyecto de Limasa no es suficiente para el grupo municipal del PSOE, que ha presentado al pleno del jueves una moción para exigir que la empresa de limpieza pare sus obras y busque otro lugar para su sede. «Limasa hizo en 2005 unos estudios de los que se podría extraer un emplazamiento distinto. Colocar los camiones de basura junto al macrohospital nos parece una barbaridad», señaló el portavoz socialista, Rafael Fuentes. Además, propuso que la parte de oficinas que se construyen se aprovechen para albergar un vivero municipal de empresas relacionadas con la innovación en materia sanitaria.
Según pudo conocer este periódico, el equipo de gobierno no está dispuesto a palizar las obras de Limasa y cambiarla de parcela. Argumentan que es la Junta la que reservó en sus planes urbanísticos que el futuro equipamiento sanitario vaya en ese lugar. Un espacio junto al que ya transitan cada día unos ochocientos camiones de escombros, basuras y restos de podas por la carretera que da acceso al vertedero de Los Ruices.
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