La UE premia la rehabilitación de la chimenea de Los Guindos (La Opinión)

El proyecto recibe una mención especial de los premios Europa Nostra de patrimonio cultural

La chimenea domina el litoral oeste de Málaga capital. Carlos Criado

LA OPINIÓN. MÁLAGA El Ayuntamiento de Málaga ha obtenido una mención especial en los Premios Unión Europea de Patrimonio Cultural –premios Europa Nostra– de 2009 gracias al proyecto de rehabilitación de la chimenea de la Fundición de Plomo de Los Guindos, del arquitecto de la Gerencia Municipal de Urbanismo Óscar Ortega Ruiz.

La entrega de los premios tendrá lugar el próximo mes de noviembre en el Palacio Real de El Pardo con la asistencia de Su Majestad La Reina doña Sofía, presidenta de honor de Hispania Nostra, la asociación que convoca y gestiona estos galardones en España. En la convocatoria de 2009 se presentaron 138 solicitudes, procedentes de 24 países en las diversas categorías y que han sido evaluadas sobre el terreno por expertos independientes, según informó el Consistorio.

Las obras de rehabilitación de la chimenea de los Guindos, de 96 metros de altura, comenzaron en agosto de 2006 y acabaron en julio de 2008. Se trató de integrar esta construcción en el actual paseo marítimo y enriquecer el paisaje urbano de la zona. Precisamente es la chimenea más alta construida en una fábrica de ladrillo de la que hay constancia en el sur de España y el ejemplo más significativo de la época en la que Málaga llegó a ser un referente industrial de relevancia europea a finales del siglo XIX y principios del XX.

Cada uno de los cuatro jurados de los Premios de Patrimonio ha seleccionado las propuestas más destacadas y aquellas que mejor responden al objeto fundacional de estos premios: fomentar la conservación del patrimonio. España ha obtenido seis reconocimientos, entre ellos el malagueño.

Estos galardones, que se conceden anualmente, se pusieron en marcha en 2002 para reconocer iniciativas destacadas en el sector del patrimonio cultural europeo, en categorías que van desde la restauración de edificios y su adaptación a nuevos usos, hasta la rehabilitación de paisajes urbanos y rurales, pasando por la interpretaciones de yacimientos arqueológicos y la conservación de las colecciones arte. El jurado tiene en cuenta la calidad del trabajo realizado, su relevancia cultural, educativa y social, la investigación preliminar llevada a cabo así como el respeto por el valor artístico, cultural y social junto a la autenticidad e integridad. También se ha prestado especial atención a la sostenibilidad, interpretación y presentación, labor educativa, consolidación y gestión, y la responsabilidad social del mismo.