Celia Villalobos, diputada del PP, acusó ayer al «sectarismo y la prepotencia» del PSOE que el proyecto para integrar el Guadalmedina en la ciudad sea una realidad. Y para ello, recordó que existe un informe, que costó un millón de euros, que aporta una solución hidráulica al cauce como paso previo para abordar la parte medio ambiental y urbanística del proyecto y que ha sido ignorado por el Ministerio de Medio Ambiente desde 2004, año en que los socialistas llevaron al Gobierno central.
«Ese estudio existe, son unos documentos que están guardados en cuatro cajas y que cuando la ministra (Cristina) Narbona se hace cargo de Medio Ambiente niega su existencia y lo desestima», afirmó en una comparecencia pública en la que pidió al Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex), dependiente del Ministerio de Fomento, a que se haga eco de ese informe.
La exministra de Sanidad se refirió al Guadalmedina como una «herida abierta» en la ciudad y reprochó al PSOE que no haya hecho nada pese a que en 1987 se firmó un acuerdo entre el entonces alcalde del PSOE, Pedro Aparicio, y el presidente de la Junta de Andalucía en aquel momento, José Rodríguez de la Borbolla.
«Arma electoral»
La exalcaldesa de Málaga presentó antes de las elecciones generales de 2000, un proyecto para embovedar el río. «A ver si el PSOE lo que pretende ahora es utilizar el Guadalmedina como arma electoral, cuando en su momento me acusaron a mí de hacerlo», dijo.
La diputada popular aprovechó este asunto para criticar la inexistencia de política de aguas en la provincia desde 2004 por parte de los ejecutivos socialistas al desechar el plan hidrológico elaborado por el PP. «Cuando lleguen las vacas flacas no estaremos preparados», apostilló.
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