El alcalde acepta fraccionar el pago mientras que el PSOE le culpa al alcalde por la especulación de su urbanismo
JAVIER GARCÍA RECIO El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, dejó ayer claro la posición del gobierno municipal en relación a la petición de Endesa de revocar el convenio urbanístico suscrito con la corporación: no a la rescisión, sí a la posibilidad de negociar un fraccionamiento del pago de los 58 millones comprometidos por Endesa en dicho acuerdo.
Tal como informaba ayer este periódico, la sociedad Endesa y su mercantil Nueva Marina Real Estate han presentado un requerimiento para revocar el convenio urbanístico que suscribieron con el Ayuntamiento en agosto de 2008, alegando que se ha puesto en marcha un expediente de deslinde de una parte de los terrenos afectos al convenio que «modifica sus determinaciones e imposibilita su cumplimiento».
El convenio estipula la recalificación de los suelos de la antigua fábrica La Térmica, unos 100.000 metros cuadrados. Ello permitiría a Endesa levantar 1.000 viviendas, de las que 232 serían de VPO. A cambio, Endesa se comprometía a compensar al Ayuntamiento con 58 millones de euros destinados a sufragar obras de infraestructura, entre ellas un nuevo puente sobre el Guadalhorce, la ampliación de la calle Indurain, el soterramiento de Cánovas o la mejora de la subestación eléctrica de Los Ramos.
De la Torre aseguró ayer que aunque el panorama económico es distinto al del 2008 y comprende que puede haber dificultades para el pago «nos hemos negado a anular el convenio porque no hay razones para ello, tal y como se ha demostrado en los informes técnicos y jurídicos que hemos presentado», por lo que «el convenio tiene plena eficacia».
El alcalde explicó que el Ayuntamiento ha cumplido con su compromiso de planificar el sector de La Térmica en los términos pactados en el convenio suscrito el 5 de agosto de 2008 y así se recoge en el nuevo PGOU, aprobado definitivamente.
Por ello, mandó un claro mensaje a los responsables de Endesa: «Nuestros compromisos los mantenemos, ustedes mantengan los suyos».
A partir de ahí mostró la voluntad del Ayuntamiento de negociar con los firmantes del convenio un calendario de pago «que haga factible la ejecución del mismo».
De otro lado, el PSOE se pronunció también sobre la situación generada por Endesa y su deseo de revocar el convenio. Los socialistas señalaron que el alcalde «recoge ahora la herencia de un urbanismo diseñado por su equipo de gobierno basado exclusivamente en una especulación urbanística sujeta a una serie de convenios urbanísticos que se vienen abajo uno tras otro», y pusieron como ejemplo «los casos de La Térmica, Repsol o Martiricos, que arruinan el periodo 2011-2015 antes de empezarlo».
La portavoz municipal, María Gámez, señaló que el interés general de la ciudad se verá afectado por unas operaciones económicas «mal gestionadas», que «no aportan nada al futuro de la ciudad, vendiendo en los últimos años más suelo municipal que en toda la historia de Málaga».
Tal como informaba ayer este periódico, la sociedad Endesa y su mercantil Nueva Marina Real Estate han presentado un requerimiento para revocar el convenio urbanístico que suscribieron con el Ayuntamiento en agosto de 2008, alegando que se ha puesto en marcha un expediente de deslinde de una parte de los terrenos afectos al convenio que «modifica sus determinaciones e imposibilita su cumplimiento».
El convenio estipula la recalificación de los suelos de la antigua fábrica La Térmica, unos 100.000 metros cuadrados. Ello permitiría a Endesa levantar 1.000 viviendas, de las que 232 serían de VPO. A cambio, Endesa se comprometía a compensar al Ayuntamiento con 58 millones de euros destinados a sufragar obras de infraestructura, entre ellas un nuevo puente sobre el Guadalhorce, la ampliación de la calle Indurain, el soterramiento de Cánovas o la mejora de la subestación eléctrica de Los Ramos.
De la Torre aseguró ayer que aunque el panorama económico es distinto al del 2008 y comprende que puede haber dificultades para el pago «nos hemos negado a anular el convenio porque no hay razones para ello, tal y como se ha demostrado en los informes técnicos y jurídicos que hemos presentado», por lo que «el convenio tiene plena eficacia».
El alcalde explicó que el Ayuntamiento ha cumplido con su compromiso de planificar el sector de La Térmica en los términos pactados en el convenio suscrito el 5 de agosto de 2008 y así se recoge en el nuevo PGOU, aprobado definitivamente.
Por ello, mandó un claro mensaje a los responsables de Endesa: «Nuestros compromisos los mantenemos, ustedes mantengan los suyos».
A partir de ahí mostró la voluntad del Ayuntamiento de negociar con los firmantes del convenio un calendario de pago «que haga factible la ejecución del mismo».
De otro lado, el PSOE se pronunció también sobre la situación generada por Endesa y su deseo de revocar el convenio. Los socialistas señalaron que el alcalde «recoge ahora la herencia de un urbanismo diseñado por su equipo de gobierno basado exclusivamente en una especulación urbanística sujeta a una serie de convenios urbanísticos que se vienen abajo uno tras otro», y pusieron como ejemplo «los casos de La Térmica, Repsol o Martiricos, que arruinan el periodo 2011-2015 antes de empezarlo».
La portavoz municipal, María Gámez, señaló que el interés general de la ciudad se verá afectado por unas operaciones económicas «mal gestionadas», que «no aportan nada al futuro de la ciudad, vendiendo en los últimos años más suelo municipal que en toda la historia de Málaga».
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