La Universidad de Málaga ha sido tajante: la urbanización de la prolongación del bulevar Louis Pasteur hasta la ampliación del campus de Teatinos no se hará ahora «porque no toca».
La rectora Adelaida de la Calle explicó ayer, en el transcurso del claustro, que se trata de una actuación programada para la cuarta fase del proyecto de urbanización del nuevo millón de metros cuadrados que tendrá la institución para desarrollarse en los próximos 15 años.
De la Calle repasó la inversión recibida hasta el momento para la fase 1 y 2 (casi cien millones), que permitirán la ejecución de nuevos edificios y la urbanización de los terrenos donde se proyectan los colegios mayores. «La UMA tendría que desembolsar ahora cuatro millones para una obra prevista para dentro de unos años, por eso se estudiaron recorridos alternativos de transporte mientras llegaba ese momento», detalló De la Calle.
Con ello respondía a varios grupos claustrales que exigían una explicación sobre este asunto después de que el Ayuntamiento reclamase a la UMA la ampliación del bulevar Louis Pasteur y la vertebración así de todo el campus de Teatinos.
Pero De la Calle fue aún más explícita y cuestionó sin ambages que la lanzadera (autobús que une Teatinos con la ampliación) sea costosa. «Son 10.000 personas las que a diario están en la ampliación, todos contribuyentes y, por tanto, con derecho a transporte. La UMA es como un vecino más de Málaga, que paga sus impuestos y, por tanto, legitimado para reclamar unos servicios».
Por otra parte, los estudiantes también pidieron una solución a la salida del campus desde el edificio que alberga las escuelas técnicas de Informática y Teleco. De la Calle dijo que la construcción de una rotonda sería una solución «complicada» y que estudian habilitar una antigua carretera próxima a la zona, pero para la que habría que cruzar las vías del metro y necesitan autorización.
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