Es la cantidad que requiere el proyecto del suburbano para mantener el avance en lo que resta de año y hacer posible que los trenes echen a andar a lo largo de 2013
SEBASTIÁN SÁNCHEZ / MÁLAGA | ACTUALIZADO 05.06.2012 - 01:00
El Metro de Málaga avanza con respiración asistida. Evitar el colapso de la mayor infraestructura de cuantas tiene en marcha la Junta de Andalucía en la región está obligando a los responsables de la Consejería de Fomento a buscar 19 millones de euros para dar continuidad a los trabajos en la presente anualidad y mantener viva la idea de que los trenes pueden empezar a recorrer los túneles de Carretera de Cádiz y Teatinos a lo largo del año 2013. Una cifra que, sin embargo, otras fuentes estimaron baja, ya que apuntaron que es más dinero el necesario para sufragar que le corresponde a la Administración regional en esta parte de la obra.
La incertidumbre sobre cuándo sonarán por vez primera las campanas de los trenes se suma a los no pocos interrogantes que pesan sobre la cuestión sustancial del presente y el futuro del ferrocarril urbano: el dinero. Al respecto, desde la Consejería de Fomento se insiste en que se está analizando el escenario económico y las condiciones en la que se encuentra el proyecto.
Quien sí aporta datos es el coordinador de IU en la provincia y portavoz de la coalición en el Parlamento andaluz, José Antonio Castro. "Esperamos tener en breve tiempo el compromiso formal para tener los 19 millones de euros que se necesitan para avanzar en la obra", expuso el parlamentario, quien fue taxativo respecto al momento actual. "Hoy tenemos cero euros y lo que esperamos es tener encima de la mesa de la consejería 19 millones; estamos buscando ese dinero", dijo.
Sea como fuere, para Castro es "improbable" la opción de que el Metro funcione en febrero, circunstancia que genera nuevas dudas respecto, por ejemplo, a las condiciones fijadas en el préstamo concedido por el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y que obliga a la concesionaria a empezar a pagarlo a mediados de febrero de 2013. Para ello, hace algunas semanas, la titular de Fomento, Elena Cortés, remitió a la Consejería de Hacienda la petición para disponer de estos fondos. "Se le ha dicho que es prioridad número uno, porque ver obras empezadas que no avanzan es lo peor que puede haber", apostillaron fuentes próximas al Gobierno andaluz.
El peso de la incertidumbre es mayor si a la pieza de la denominada V (Martín Carpena-Renfe-Teatinos) se suma la necesidad de asumir el tajo de Callejones del Perchel, que incluye la llegada del suburbano hasta la estación Guadalmedina, antesala a la entrada en el centro. Este tramo, asumido en su totalidad por la Junta y paralizado, requiere de unos 30 millones de euros más para su desarrollo.
Mientras el coordinador de IU y su socio en el Gobierno andaluz, el PSOE, avalan la actitud de la consejera al decir que no puede garantizar que el Metro eche a andar en febrero, las voces críticas se suceden en el PP y en colectivos de la ciudad como la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM). Su presidente, Javier González de Lara, fue claro: "No se puede entender que se dude sobre la viabilidad de un proyecto estratégico; hay que analizar la situación con rigor y que los recortes no le lleguen a una infraestructura que ya está presupuestada". "La ciudadanía necesita que se clarifiquen los objetivos y el calendario; todo del mundo puede entender un retraso, pero hay que tener en cuenta que hay unos presupuestos; hace falta aclarar cómo va a ser la finalización de lo que ahora está en marcha", dijo.
Para Enrique Benítez, portavoz del PSOE en la Comisión de Fomento en la Cámara andaluza, "la consejera ha sido prudente y sincera haciendo estas manifestaciones porque estamos en una situación económica muy complicada que afecta a todos los sectores". "Estamos viviendo una situación de reformulación de las cuentas económicas de la Junta; la voluntad es la de poner en servicio el Metro en 2013, lo que no quiso confirmar es que sea en febrero porque espera tener todos los datos encima de la mesa", añadió.
Por el contrario, el presidente provincial del PP, Elías Bendodo, tachó de "mala noticia" el posible retraso del suburbano. "Exigimos a la Junta que sea transparente y que informe debidamente de cuál es la situación en la que se encuentra esta infraestructura; no es razonable que el alcalde de la ciudad se entere por los medios de comunicación por lo que insta a la consejera a explicar qué va a ocurrir y cuáles son los planes", añadió.
La incertidumbre sobre cuándo sonarán por vez primera las campanas de los trenes se suma a los no pocos interrogantes que pesan sobre la cuestión sustancial del presente y el futuro del ferrocarril urbano: el dinero. Al respecto, desde la Consejería de Fomento se insiste en que se está analizando el escenario económico y las condiciones en la que se encuentra el proyecto.
Quien sí aporta datos es el coordinador de IU en la provincia y portavoz de la coalición en el Parlamento andaluz, José Antonio Castro. "Esperamos tener en breve tiempo el compromiso formal para tener los 19 millones de euros que se necesitan para avanzar en la obra", expuso el parlamentario, quien fue taxativo respecto al momento actual. "Hoy tenemos cero euros y lo que esperamos es tener encima de la mesa de la consejería 19 millones; estamos buscando ese dinero", dijo.
Sea como fuere, para Castro es "improbable" la opción de que el Metro funcione en febrero, circunstancia que genera nuevas dudas respecto, por ejemplo, a las condiciones fijadas en el préstamo concedido por el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y que obliga a la concesionaria a empezar a pagarlo a mediados de febrero de 2013. Para ello, hace algunas semanas, la titular de Fomento, Elena Cortés, remitió a la Consejería de Hacienda la petición para disponer de estos fondos. "Se le ha dicho que es prioridad número uno, porque ver obras empezadas que no avanzan es lo peor que puede haber", apostillaron fuentes próximas al Gobierno andaluz.
El peso de la incertidumbre es mayor si a la pieza de la denominada V (Martín Carpena-Renfe-Teatinos) se suma la necesidad de asumir el tajo de Callejones del Perchel, que incluye la llegada del suburbano hasta la estación Guadalmedina, antesala a la entrada en el centro. Este tramo, asumido en su totalidad por la Junta y paralizado, requiere de unos 30 millones de euros más para su desarrollo.
Mientras el coordinador de IU y su socio en el Gobierno andaluz, el PSOE, avalan la actitud de la consejera al decir que no puede garantizar que el Metro eche a andar en febrero, las voces críticas se suceden en el PP y en colectivos de la ciudad como la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM). Su presidente, Javier González de Lara, fue claro: "No se puede entender que se dude sobre la viabilidad de un proyecto estratégico; hay que analizar la situación con rigor y que los recortes no le lleguen a una infraestructura que ya está presupuestada". "La ciudadanía necesita que se clarifiquen los objetivos y el calendario; todo del mundo puede entender un retraso, pero hay que tener en cuenta que hay unos presupuestos; hace falta aclarar cómo va a ser la finalización de lo que ahora está en marcha", dijo.
Para Enrique Benítez, portavoz del PSOE en la Comisión de Fomento en la Cámara andaluza, "la consejera ha sido prudente y sincera haciendo estas manifestaciones porque estamos en una situación económica muy complicada que afecta a todos los sectores". "Estamos viviendo una situación de reformulación de las cuentas económicas de la Junta; la voluntad es la de poner en servicio el Metro en 2013, lo que no quiso confirmar es que sea en febrero porque espera tener todos los datos encima de la mesa", añadió.
Por el contrario, el presidente provincial del PP, Elías Bendodo, tachó de "mala noticia" el posible retraso del suburbano. "Exigimos a la Junta que sea transparente y que informe debidamente de cuál es la situación en la que se encuentra esta infraestructura; no es razonable que el alcalde de la ciudad se entere por los medios de comunicación por lo que insta a la consejera a explicar qué va a ocurrir y cuáles son los planes", añadió.
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