sábado, 9 de febrero de 2008

Las 400 familias de La Alberquilla temen que el Parque Empresarial obligue a derribar sus casas. Mijas (SUR)


Los vecinos han solicitado una reunión con el alcalde y no descartan manifestarse para exigir una solución
Mijas ha sido noticia en las últimas semanas por los expedientes de demolición de unas 300 viviendas construidas en suelo rústico no urbanizable en diferentes puntos del municipio. Dos de estas órdenes de derribo son para inmuebles levantados en La Alberquilla. Pero éste no es el único asunto que preocupa a las 400 familias de este diseminado. También está el Plan de Ordenación del Territorio (POT) de la Costa del Sol, que dividió los terrenos en dos partes. «Desde el puente de la autopista hacia el sur se considera zona inundable donde no se puede construir, y hacia el norte, zona de oportunidad, en donde está proyectado el Parque Empresarial de Mijas (PEM)», explicó José Antonio Sánchez, presidente de la asociación de vecinos Chaparral-La Alberquilla. Todo ello con el «agravante» de la zona verde del entorno del río Fuengirola, catalogada por la Cuenca Mediterránea Andaluza.En varias ocasiones, el concejal de Urbanismo, Juan Cruz, ha reiterado que el PEM se instalará al norte del diseminado, con lo que no afectará a estas 400 familias. Pero la duda acecha. «No se sabe dónde se va a ubicar exactamente, ni por dónde van a discurrir los viales y demás infraestructuras. Queremos el parque, pero sin perjudicar a nadie y, por supuesto, sin ningún derribo», recalcó Sánchez, que también es edil del PP en Mijas.En este mismo sentido se expresaba José Manuel Escalona. «Que pongan el PEM porque será un motor de la economía local, pero no a costa nuestra», exigía este vecino, que lleva 15 años viviendo en La Alberquilla. Casi el mismo tiempo que Pepi López es propietaria de la parcela en la que levantó la que desde hace ocho años es su casa «con el consentimiento del Ayuntamiento». «Si son ilegales, los impuestos que pagamos también lo son», subrayó.Los vecinos aseguran estar cansados de tanta incertidumbre. Por lo pronto, ya han solicitado una reunión con el alcalde, Antonio Sánchez, para que les informe de la situación. Además, amenazan con organizar manifestaciones e incluso cortar el Camino de Coín para hacerse oír.Desde el Ayuntamiento recalcaron ayer que, si bien puede haber demoliciones de casas situadas en zona inundable de dominio público, también habrá muchas que podrán regularizarse aprovechando el desarrollo urbanístico de la zona a través del PEM.

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