El principal proyecto del barrio es un polideportivo con piscina cubierta que se construirá junto a las pistas deportivas que ya existen · Los vecinos, contentos con los equipamientos, piden más seguridad y limpieza
Huelin, más allá de su vocación marinera, que resiste pese a los tiempos, tiene un parque que se conoce en toda la ciudad, unas pistas deportivas públicas igualmente utilizadas por ciudadanos de todos los barrios y un polideportivo en proyecto, llamado a ser otro referente de ocio. Sus vecinos están contentos con los equipamientos de los que disfrutan, pero demandan más limpieza y seguridad, quizá los dos grandes caballos de batalla de todos los distritos de la capital malagueña.
El principal proyecto de Huelin es el citado polideportivo, una instalación que debe contar -según el proyecto presentado por el Consistorio- como mínimo con salas de fitness, una piscina de 25 por 12,5 metros y otra de 60 metros cuadrados para aprendizaje, salas de musculación y maquinaria cardiovascular, salas polivalentes, vestuarios, cafetería, aparcamientos y pistas exteriores. El Ayuntamiento ultima los trámites para sacar a concurso la construcción y explotación tanto de esta instalación, como de otra de similares características proyectada en el antiguo cuartel de Segalerva. Pero a corto plazo los vecinos proponen que se estudie la posibilidad de cubrir alguna de las pistas al aire libre del barrio para que pueda albergar competiciones municipales.
Sebastián Acedo, presidente de la asociación de vecinos Parque del Mar, explica que tienen otras pequeñas reivindicaciones para el barrio de Huelin, como mejoras en calle Caramba, una pequeña vía terriza que se encuentra junto a calle Goya. "Es un foco de suciedad que habría que eliminar", arguye Acedo. Además, algunos de los árboles de la barriada están levantando el acerado público, como ocurre por ejemplo en los aledaños del ambulatorio. "No debe estar muy bien estudiado, pues se trata de una inversión relativamente reciente", lamenta el presidente del principal colectivo vecinal de la zona. En este sentido, también demanda soluciones al respecto.
El aparcamiento es la otra gran preocupación de esta añejo barrio malagueño, un núcleo urbano de la capital que en los últimos años ha crecido por encima del número de plazas disponibles. Pese a todo, cuenta con un aparcamiento municipal soterrado, pero sus vecinos consideran necesario nuevas infraestructuras para mejorar la movilidad.
Huelin, más allá de su vocación marinera, que resiste pese a los tiempos, tiene un parque que se conoce en toda la ciudad, unas pistas deportivas públicas igualmente utilizadas por ciudadanos de todos los barrios y un polideportivo en proyecto, llamado a ser otro referente de ocio. Sus vecinos están contentos con los equipamientos de los que disfrutan, pero demandan más limpieza y seguridad, quizá los dos grandes caballos de batalla de todos los distritos de la capital malagueña.
El principal proyecto de Huelin es el citado polideportivo, una instalación que debe contar -según el proyecto presentado por el Consistorio- como mínimo con salas de fitness, una piscina de 25 por 12,5 metros y otra de 60 metros cuadrados para aprendizaje, salas de musculación y maquinaria cardiovascular, salas polivalentes, vestuarios, cafetería, aparcamientos y pistas exteriores. El Ayuntamiento ultima los trámites para sacar a concurso la construcción y explotación tanto de esta instalación, como de otra de similares características proyectada en el antiguo cuartel de Segalerva. Pero a corto plazo los vecinos proponen que se estudie la posibilidad de cubrir alguna de las pistas al aire libre del barrio para que pueda albergar competiciones municipales.
Sebastián Acedo, presidente de la asociación de vecinos Parque del Mar, explica que tienen otras pequeñas reivindicaciones para el barrio de Huelin, como mejoras en calle Caramba, una pequeña vía terriza que se encuentra junto a calle Goya. "Es un foco de suciedad que habría que eliminar", arguye Acedo. Además, algunos de los árboles de la barriada están levantando el acerado público, como ocurre por ejemplo en los aledaños del ambulatorio. "No debe estar muy bien estudiado, pues se trata de una inversión relativamente reciente", lamenta el presidente del principal colectivo vecinal de la zona. En este sentido, también demanda soluciones al respecto.
El aparcamiento es la otra gran preocupación de esta añejo barrio malagueño, un núcleo urbano de la capital que en los últimos años ha crecido por encima del número de plazas disponibles. Pese a todo, cuenta con un aparcamiento municipal soterrado, pero sus vecinos consideran necesario nuevas infraestructuras para mejorar la movilidad.
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