Sepes, el otro firmante del acuerdo, aportará tres millones de euros para mejoras en el polígono Guadalhorce, que pasa a manos del Ayuntamiento
JAVIER GARCÍA RECIO MÁLAGA Además de los convenios ya anunciados correspondientes a los sectores de Arraijanal, La Térmica e Hipercor, el gobierno municipal del Ayuntamiento de Málaga tiene previsto llevar para su aprobación al pleno del próximo jueves, dos convenios más, firmados con la empresa pública Sepes (Entidad Pública Empresarial de Suelo) que permitirán desbloquear la construcción de 1.400 viviendas de protección oficial (VPO) en los terrenos de la antigua Cross, además de permitir que el polígono del Guadalhorce pase definitivamente a manos del Ayuntamiento.
El convenio ha tenido una larga tramitación, ya que se firmó hace exactamente un año, el 14 de enero pasado, entre el alcalde de la capital, Francisco de la Torre y el director general de Sepes, Félix Arias y hasta ahora no va a poder ser ratificado. Ello ha encrespado los ánimos de los responsables de la Asociación de Polígonos de Málaga (Apoma) y de los empresarios del polígono del Guadalhorce en particular que en las últimas semanas han reclamado al Ayuntamiento que de luz verde al convenio.
Las estipulaciones del convenio plantean que el polígono del Guadalhorce, el más grande de la capital por su extensión y número de empresas, pasará a depender totalmente del Ayuntamiento, que queda obligado a ocuparse de su mantenimiento.
Bellavista. A su vez, el futuro polígono de Bellavista, que ocupa los terrenos de la antigua Cross, pasará a manos de la empresa pública Sepes, dependiente del Ministerio de la Vivienda. De esta manera ambas entidades cierran las negociaciones en torno a los contenciosos que mantenían especialmente en relación al polígono del Guadalhorce.
Los dos convenios que el jueves irán al pleno vienen a actualizar los que fueron firmados en 1992 y que apenas se pudieron desarrollar. Ambos han sufrido serias modificaciones que suponen importantes mejoras que benefician especialmente al Ayuntamiento.
Así, respecto al Guadalhorce, Sepes cede gratuitamente tres parcelas, que ya estaban estipuladas en el viejo convenio de 1992 pero que no se habían donado todavía. Además, como novedad, Sepes abona al Ayuntamiento tres millones de euros para obras de mejora y reparación del recinto industrial. La empresa también cede la parcela de 15.000 metros donde se levantará la cárcel de tercer grado, parcela que pasa a ser municipal .
A cambio, el Ayuntamiento se hace cargo de la recepción del polígono que a partir de ahora pasará a ser responsabilidad municipal. Por último los convenio fijan que ambas instituciones retirarán los recursos contenciosos administrativos que se habían interpuestos en los juzgados para dilucidar la titularidad de la parcela donde se instalará la cárcel.
Una de las estipulaciones más importantes se refiere al polígono de Bellavista, de más de 850.000 metros cuadrados, que pasa definitivamente a manos de Sepes, que pagará al Ayuntamiento los seis millones de euros que faltan del total de 12 millones en que se fijó por la venta. La empresa tiene previsto destinar 564.078 metros cuadrados a uso industrial y los 272.420 metros restantes a la construcción de unas 1.400 VPO.
JAVIER GARCÍA RECIO MÁLAGA Además de los convenios ya anunciados correspondientes a los sectores de Arraijanal, La Térmica e Hipercor, el gobierno municipal del Ayuntamiento de Málaga tiene previsto llevar para su aprobación al pleno del próximo jueves, dos convenios más, firmados con la empresa pública Sepes (Entidad Pública Empresarial de Suelo) que permitirán desbloquear la construcción de 1.400 viviendas de protección oficial (VPO) en los terrenos de la antigua Cross, además de permitir que el polígono del Guadalhorce pase definitivamente a manos del Ayuntamiento.
El convenio ha tenido una larga tramitación, ya que se firmó hace exactamente un año, el 14 de enero pasado, entre el alcalde de la capital, Francisco de la Torre y el director general de Sepes, Félix Arias y hasta ahora no va a poder ser ratificado. Ello ha encrespado los ánimos de los responsables de la Asociación de Polígonos de Málaga (Apoma) y de los empresarios del polígono del Guadalhorce en particular que en las últimas semanas han reclamado al Ayuntamiento que de luz verde al convenio.
Las estipulaciones del convenio plantean que el polígono del Guadalhorce, el más grande de la capital por su extensión y número de empresas, pasará a depender totalmente del Ayuntamiento, que queda obligado a ocuparse de su mantenimiento.
Bellavista. A su vez, el futuro polígono de Bellavista, que ocupa los terrenos de la antigua Cross, pasará a manos de la empresa pública Sepes, dependiente del Ministerio de la Vivienda. De esta manera ambas entidades cierran las negociaciones en torno a los contenciosos que mantenían especialmente en relación al polígono del Guadalhorce.
Los dos convenios que el jueves irán al pleno vienen a actualizar los que fueron firmados en 1992 y que apenas se pudieron desarrollar. Ambos han sufrido serias modificaciones que suponen importantes mejoras que benefician especialmente al Ayuntamiento.
Así, respecto al Guadalhorce, Sepes cede gratuitamente tres parcelas, que ya estaban estipuladas en el viejo convenio de 1992 pero que no se habían donado todavía. Además, como novedad, Sepes abona al Ayuntamiento tres millones de euros para obras de mejora y reparación del recinto industrial. La empresa también cede la parcela de 15.000 metros donde se levantará la cárcel de tercer grado, parcela que pasa a ser municipal .
A cambio, el Ayuntamiento se hace cargo de la recepción del polígono que a partir de ahora pasará a ser responsabilidad municipal. Por último los convenio fijan que ambas instituciones retirarán los recursos contenciosos administrativos que se habían interpuestos en los juzgados para dilucidar la titularidad de la parcela donde se instalará la cárcel.
Una de las estipulaciones más importantes se refiere al polígono de Bellavista, de más de 850.000 metros cuadrados, que pasa definitivamente a manos de Sepes, que pagará al Ayuntamiento los seis millones de euros que faltan del total de 12 millones en que se fijó por la venta. La empresa tiene previsto destinar 564.078 metros cuadrados a uso industrial y los 272.420 metros restantes a la construcción de unas 1.400 VPO.
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