Estepona registró en 2007 851 solicitudes para una vivienda. Marbella acumula una demanda de unas 12.000 personas.
La desproporción entre la oferta y la demanda en materia de VPO no es nueva. Los buenos precios y las calidades que ofrecen siempre han sido los principales atractivos de un sector que por ahora no soluciona el futuro de muchísimas familias que por diferentes motivos no acceden o no tienen suerte en los concursos. O más que concursos, ya son muchos los que se toman este trámite como una verdadera lotería.
Uno de los ejemplos más sangrantes queda patente en Estepona, municipio en el que se registraron un total de 851 solicitudes para acceder a una sola vivienda de VPO en el año 2007. Ese mismo año comenzaron las obras de una promoción de 26 viviendas de La Lobilla y se firmaron los contratos de los adjudicatarios, pero la promoción todavía no ha sido finalizada por diversos contratiempos.
Muy cerca de se encuentra Marbella, cuyo futuro inmediato tampoco es demasiado alentador. Según las estimaciones del ayuntamiento marbellí, las primeras viviendas (37) de VPO que se construirán en el municipio desde 1989 se entregarán dentro de dos años. Más vale tarde que nunca, pero según el consejero de Vivienda de la Junta de Andalucía, Juan Espadas, la ciudad acumula a cerca de 12.000 demandantes de vivienda de protección oficial, el 9,5% de la población censada en una población con más de 126.000 habitantes. No menos impactante son los datos que ofrece de una promoción en Fuengirola. 1.800 solicitudes para un total de 120 viviendas en la zona de Los Pacos cuya adjudicación quedó desierta por los elevados costes. El Ayuntamiento de Fuengirola subastó el terreno a una empresa privada sin recoger en el pliego de condiciones el módulo más económico que posee la ley de vivienda protegida andaluza al que debían adherirse. Por este motivo, y una vez terminadas las viviendas, el coste de las mismas se elevó a cifras de mercado libre. La empresa, dentro de la ley, eligió el módulo más caro.
La desproporción entre la oferta y la demanda en materia de VPO no es nueva. Los buenos precios y las calidades que ofrecen siempre han sido los principales atractivos de un sector que por ahora no soluciona el futuro de muchísimas familias que por diferentes motivos no acceden o no tienen suerte en los concursos. O más que concursos, ya son muchos los que se toman este trámite como una verdadera lotería.
Uno de los ejemplos más sangrantes queda patente en Estepona, municipio en el que se registraron un total de 851 solicitudes para acceder a una sola vivienda de VPO en el año 2007. Ese mismo año comenzaron las obras de una promoción de 26 viviendas de La Lobilla y se firmaron los contratos de los adjudicatarios, pero la promoción todavía no ha sido finalizada por diversos contratiempos.
Muy cerca de se encuentra Marbella, cuyo futuro inmediato tampoco es demasiado alentador. Según las estimaciones del ayuntamiento marbellí, las primeras viviendas (37) de VPO que se construirán en el municipio desde 1989 se entregarán dentro de dos años. Más vale tarde que nunca, pero según el consejero de Vivienda de la Junta de Andalucía, Juan Espadas, la ciudad acumula a cerca de 12.000 demandantes de vivienda de protección oficial, el 9,5% de la población censada en una población con más de 126.000 habitantes. No menos impactante son los datos que ofrece de una promoción en Fuengirola. 1.800 solicitudes para un total de 120 viviendas en la zona de Los Pacos cuya adjudicación quedó desierta por los elevados costes. El Ayuntamiento de Fuengirola subastó el terreno a una empresa privada sin recoger en el pliego de condiciones el módulo más económico que posee la ley de vivienda protegida andaluza al que debían adherirse. Por este motivo, y una vez terminadas las viviendas, el coste de las mismas se elevó a cifras de mercado libre. La empresa, dentro de la ley, eligió el módulo más caro.
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