sábado, 10 de octubre de 2009

MARBELLA Junta y Ayuntamiento apuran la tramitación del PGOU para aprobarlo antes de fin de año. (SUR)

La elaboración de los informes sectoriales que deben completar el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Marbella han retrasado las previsiones más optimistas fijadas en el calendario para la aprobación definitiva del documento por parte de la Junta de Andalucía. Sin embargo, no supondrán un lastre que pueda evitar que el visto bueno al texto urbanístico se produzca antes de que termine al año.

Al menos éste es el objetivo del Gobierno autonómico y del Ayuntamiento de Marbella, que trabajan para acelerar los trámites y recortar los plazos de tramitación de cara a que el Ejecutivo andaluz otorgue la bendición final al PGOU el próximo mes de diciembre o incluso antes. El consejero de Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Espadas, no se pronunció ayer sobre las fechas en las que podría aprobarse el Plan, pero sí apuntó que ambas administraciones están trabajando de forma conjunta para que el proceso «sea lo más rápido posible».

Espadas aseguró que su consejería y el Consistorio marbellí están celebrando reuniones para ultimar las correcciones del documento urbanístico y destacó que la Junta se encuentra «absolutamente implicada» con objeto de que la tramitación del PGOU «se desatasque».

Entrega oficiosa
El Ayuntamiento de Marbella llevó a cabo a finales de julio la segunda aprobación provisional del PGOU y en agosto el documento llegó a la Junta de Andalucía. De forma oficiosa, a juicio del Gobierno autonómico, que detectó, tras un primer análisis, que el texto se encontraba incompleto ante la ausencia de los informes sectoriales de las consejerías de Medio Ambiente y Cultura y de las direcciones generales de Costas y Carreteras. El Plan, por tanto, «no ha sido remitido todavía oficialmente a la Junta», según afirmó ayer el consejero de Vivienda y Ordenación del Territorio.

El Gobierno regional cuenta con cinco meses para aprobar de manera definitiva el documento urbanístico, aunque Espadas se comprometió en julio a acortar los plazos casi a la mitad. Un compromiso que sigue en pie y que será aún mayor a la hora de apurar la tramitación del documento, según fuentes del Ejecutivo andaluz.
Sólo así podrá contar Marbella con un nuevo planeamiento urbanístico en 2009. Si la Junta mantiene el calendario fijado inicialmente, la aprobación del PGOU no llegaría antes de enero del próximo año, dado que el plazo empezaría a contar una vez que estén concluidos los informes sectoriales y estos se remitan, junto al resto del documento, a la Administración autonómica. La voluntad política de la Junta es reducir por debajo de esos dos meses y medio la tramitación del texto.

En este sentido, el consejero subrayó ayer que, aunque el Gobierno regional dispone de cinco meses para la aprobación definitiva del Plan, en el caso de Marbella «se conoce bien el documento y creo que no va a haber dificultad». No en vano, el texto inicial fue elaborado por el equipo redactor contratado por la Junta, una vez que el Ejecutivo andaluz retiró las competencias urbanísticas al Ayuntamiento de Marbella.

Cordialidad
El nuevo planeamiento urbanístico de la ciudad se ha diseñado además siguiendo las directrices de la Administración autonómica, según destacan desde el equipo de Gobierno municipal, que consideran que no debe existir ningún problema para alcanzar con celeridad un dictamen favorable por parte de la Junta una vez entregados los informes sectoriales.

De hecho, para no bloquear la aprobación del PGOU, el Ayuntamiento de Marbella decidió dejar fuera de ordenación tres promociones ilegales con cerca de medio millar de viviendas habitadas. Ante la advertencia de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio, el Ejecutivo local retiró del documento la modificación realizada para incorporar dichos inmuebles al proceso de normalización recogido en el Plan que regulariza cerca de 17.000 viviendas ilegales.

El conflicto no ha minado la relación entre ambas administraciones a la hora de colaborar para acelerar la tramitación del PGOU. Fuentes del Gobierno municipal califican de «cordial» dicha relación y subrayan la voluntad de la Junta y del Ayuntamiento para que la aprobación del nuevo planeamiento urbanístico «tenga lugar en el menor plazo de tiempo posible».

Para ello, la Concejalía de Urbanismo mantiene desde hace más de un mes diferentes reuniones con los técnicos responsables de las distintas áreas autonómicas y estatales que deben emitir los informes sectoriales pendientes de incorporar al PGOU. El objetivo es colaborar con el resto de administraciones para agilizar la elaboración de estos informes, la mitad de los cuales corresponden a la Junta de Andalucía.

Reunión de la alcaldesa
No son los únicos encuentros impulsados por el Ejecutivo local con este mismo fin. El pasado martes, la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, se reunió con Daniel Fernández Navarro, el nuevo director general de Urbanismo, área dependiente de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio. Dicha cita, a la que también asistieron otros miembros del Gobierno municipal, sirvió para ultimar correcciones en relación con el nuevo Plan, según explicó ayer Espadas.

Las previsiones iniciales, anunciadas por el Gobierno autonómico y adoptadas por el Ayuntamiento marbellí, fijaban el mes de octubre como la fecha clave en el calendario para la aprobación definitiva del PGOU. Sin embargo, se dieron de bruces con los tiempos marcados por la elaboración de los informes sectoriales que deben completar el texto urbanístico y se retrasaron hasta el mes de diciembre. Tanto la Junta como el Consistorio confían en cumplir estos plazos e, incluso, intentar recortarlos hasta finales de noviembre, aunque ambas administraciones se muestran cautas a la hora de precisar de manera oficial las fechas definitivas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario