La patronal pide a la Junta y al Consistorio que impulsen campañas para dar a conocer el nuevo escenario de seguridad jurídica
19.05.2010 -
María Gámez, Ángeles Muñoz, Miguel Gómez y Vicente García, durante la celebración de las jornadas del CIT en al hotel Guadalmina. ::JOSELE-LANZA
Ya lo dice la expresión: 'La mujer de César no sólo debe ser decente, también debe parecerlo'. Marbella está a punto de estrenar un nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el primero en 24 años, que intentará recomponer los platos rotos que dejó el gilismo y que clarificará las reglas del juego con la seguridad jurídica y urbanística por bandera. Pero no basta con que el nuevo planeamiento se publique en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), un último trámite que se espera para esta semana, o con que eche a andar en los despachos de Urbanismo. La 'buena nueva' debe traspasar las fronteras de la ciudad para ganar en impacto económico y resolver las dudas de los inversores que no lo acaban de ver tan claro.
Al menos así lo entienden los empresarios de Marbella, representados por el Centro de Iniciativas Turísticas (CIT), que ayer pidieron tanto a la Junta como al Ayuntamiento un esfuerzo en la puesta en marcha de campañas de divulgación a nivel nacional e internacional. «Es vital que las administraciones que han hecho de Marbella un modelo de colaboración ejemplarizante ayuden a difundir lo que significa el Plan General», apuntó Miguel Gómez, presidente de la patronal, en el marco de las jornadas organizadas por el colectivo para abordar desde distintos prismas los entresijos del nuevo PGOU.
No se anduvo por las ramas. El máximo representante del colectivo empresarial reconoció que al igual que hay inversores con un ojo puesto en el pistoletazo de salida al nuevo planeamiento, también hay otros sectores que «aún no tienen esa seguridad». Es en este punto donde defiende la necesidad de que, al igual que está haciendo el Ayuntamiento en distintos foros, el Gobierno andaluz lidere otra gran campaña de comunicación para que el Plan General gane en impacto económico y se convierta en un imán para movilizar al sector privado no sólo a nivel local, provincial o regional. «Cuando los mercados se recuperen Marbella va a ser la primera ciudad del litoral andaluz con un plan aprobado conforme a la ley», destacó en su intervención, donde no dejó pasar la oportunidad para destacar el peso específico que jugará el sector privado y también para reclamar a las administraciones más inversiones. Entre ellas, el corredor ferroviario, que salió a relucir en varios momentos de las jornadas sobre urbanismo.
Colaboración mutua
El mensaje llegó a sus interlocutores sin interferencias. En la misma mesa le acompañaban la delegada del Gobierno andaluz en Málaga, María Gámez, y la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz. En un clima de cordialidad, ambas se felicitaron mutuamente por la colaboración y lealtad institucional que ha presidido la elaboración del Plan pese a la compleja situación de la que se partía -con más de 18.000 viviendas en situación irregular y un notable déficit de equipamientos públicos-. Un tono que esperan tenga continuidad.
«Suponemos que una vez que el Ayuntamiento recupere suelo nos lo pondrá a disposición para que podamos poner en marcha las infraestructuras sanitarias y educativas que tanta falta hacen y que no se han podido realizar hasta ahora por falta de espacio», señaló la responsable de la Junta de Andalucía en Málaga, que confió en que el PGOU se publique esta semana en el BOJA para que al día siguiente pueda entrar en vigor. «El retraso no es imputable a la Junta porque las previsiones se hicieron con unos datos del Ayuntamiento que tardaron más en llegar», matizó.
La alcaldesa repasó por su parte algunos de los hitos del documento, como la reserva de suelo para equipamientos o zonas verdes, que se multiplicarán por tres y por cuatro respectivamente, o la normalización de 16.500 viviendas mediante el sistema de compensaciones. «No ha sido un camino donde se haya consensuado todo pero ha predominado el sentido común», dijo ante las decenas de empresarios que acudieron a las jornadas, celebradas en el hotel Guadalmina.
Allí se dieron cita el presidente de la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM), Vicente García -que valoró el revulsivo que supondrá el Plan General para la economía local, al tiempo que pidió que no se demonice el sector inmobiliario- y Juan Cobalea, vicepresidente segundo de la Cámara de Comercio de Málaga, que también apostó por la diversificación de la economía aunque recalcó que, de momento, hay que avanzar con los mimbres que se tienen. A saber: el turismo y la construcción.
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