El equipo de gobierno diseña los presupuestos de 2008 con la estimación de que se aprobará el nuevo PGOU Cree que el impacto económico del desarrollo del nuevo planeamiento empezará a dejarse notar a medio plazo
Ni un balón de oxígeno financiero que ponga a rebosar las arcas municipales de una tacada ni una llegada en mansalva de convenios urbanísticos como maná caído del cielo. Pese a que el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), tal y como fue aprobado inicialmente, prevé la construcción de 18.400 nuevas viviendas -más de 10.000 de precio asequible- en la ciudad en la próxima década, el equipo de gobierno descarta que en los primeros meses tras la aprobación del Plan General los ingresos municipales por el urbanismo crezcan de una manera exponencial. De hecho, no prevé que aumenten.El coordinador de Hacienda, Carlos Rubio, volcado estos días en cuadrar los presupuestos municipales para 2008, señaló que pese a que se están diseñando con la previsión de que el nuevo planeamiento entre en vigor a lo largo de próximo año «la repercusión será muy baja». «No podemos decir que las expectativas se disparan porque no seríamos realistas. Esperamos que para el año que viene la repercusión económica del PGOU sea limitada», abundó el responsable de las cuentas en el Ayuntamiento, al mismo tiempo que estimó que los frutos financieros del nuevo planeamiento se empezarán a recoger a medio plazo. La mejoría se notará, quizá, en los ingresos por el impuesto de construcciones, instalaciones y obras (ICIO), tributos que se han visto igualmente afectados por el retroceso en la actividad de la construcción no sólo en la ciudad sino a nivel nacional.
Más inversiones
No será un contratiempo para tejer las cuentas municipales del próximo ejercicio. Rubio avanzó que se están elaborando de una manera «realista» para que el Consistorio pueda funcionar con los ingresos que se conocen de antemano, como las recaudación por tasas e impuestos o las transferencias del Estado que corresponden a Marbella por su volumen de población. «Será un presupuesto restrictivo pero en el que se mejorará en las inversiones con respecto al de 2007», concretó el responsable de Hacienda y Personal. Las actuales cuentas, en vigor desde principios de año, fueron aprobadas por la comisión gestora, en la que Rubio también ostentó la responsabilidad de la gestión económica.Fue un hito histórico: la aprobación de un presupuesto del Ayuntamiento de Marbella dentro de los plazos que marca la ley. Ahora el equipo de gobierno quiere dar un paso más para consolidar el normal funcionamiento de la administración local. Pretende que las cuentas municipales para el próximo ejercicio estén aprobadas antes de que acabe el año en curso para que entren en vigor el 1 de enero y así no tener que prorrogar el presupuesto de 2007.
Gasto corriente
Los trabajos se centran ahora, según especificó el coordinador de Hacienda, en «aquilatar» el gasto corriente de cada delegación municipal y en cerrar algunos ajustes pendientes en el capítulo de personal. Completados estos trámites, está previsto que para principios de noviembre el borrador de los presupuestos esté sobre la mesa. Si se cumple el calendario, se aprobará definitivamente en pleno antes de que acabe el año.La alcaldesa, Ángeles Muñoz, ya avanzó hace algunas semanas que las cuentas para 2008 estarían marcadas por la austeridad en los gastos corrientes pero por un esfuerzo en el capítulo de inversiones. Reiteró además su compromiso de no subir los impuestos municipales, que se actualizarán conforme al Índice de Precios al Consumo (IPC).
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