«Varias fachadas rehabilitadas tienen ya pintadas vandálicas» (La Opinión)

Pablo Pastor,Arquitecto Técnico, afirma que las iglesias se encontraban en mal estado, ya que hacía más de cuarenta años que no se habían acometido reformas. Denuncia la falta de respeto hacia el patrimonio artístico
Pablo Pastor es uno de los arquitectos técnicos que ha participado en la rehabilitación de las fachadas y las cubiertas de las iglesias del Centro Histórico de la capital, como la de San Agustín, San Felipe Neri y San Juan Bautista, entre otras. Tras realizar una minuciosa labor, lamenta que algunos vándalos no respeten el patrimonio artístico de Málaga y ya "hayan pintado varias fachadas rehabilitadas".
-¿En qué situación se encontraban las iglesias del Centro que han sido rehabilitadas y cuáles eran sus principales deficiencias?
-El estado era bastante malo. Desde hacía más de cuarenta o cincuenta años no se habían acometido obras importantes. Nuestra prioridad ha sido intervenir, en una primera fase, cubiertas y fachadas para evitar un mayor deterioro. En la segunda fase, se acometerá la rehabilitación de los interiores. Las de San Felipe Neri y San Juan Bautista ya están en marcha.
-De todas las rehabilitaciones que se han llevado a cabo hasta la fecha, ¿cuál ha sido la más compleja y por qué?
-La más compleja por volumen y andamiaje ha sido la de San Felipe Neri, porque es un edificio que la planta principal es un óvalo y la cubierta tiene una pendiente muy pronunciada, del 80 por ciento. Tuvimos que montar un andamiaje que cubría la cubierta pero que no se apoyaba en ella, y eso fue bastante complicado. También es complejo el acceso a la iglesia de San Juan y a la de los Mártires, tanto para el aporte de material como para el desescombro. Las dos están rodeadas de edificios, muchos de ellos adosados a la iglesia.
-¿Cómo se plantea la obra de rehabilitación de una iglesia o un edificio antiguo?
-Lo primero que hay que hacer es documentarse lo máximo posible sobre el edificio. Consultar todo tipo de fuentes para conocer profundamente sus características. También es necesario saber las obras realizadas en los últimos años. Muchas de las que se realizaron en los años 50 ó 60 fueron más perjudiciales que beneficiosas para estos monumentos, por lo que mejor hubiera sido no haber hecho nada. Esto es debido a que usaron materiales modernos, como el cemento, incompatibles con los tradicionales. Por ello, se debe ser muy respetuoso con las técnicas tradicionales.
-Por tanto, ¿pueden utilizarse técnicas modernas en estas obras?
-Lo mejor es seguir usando materiales tradicionales que llevan miles de años funcionando, como la teja árabe, el mortero tradicional de cal o los mármoles. De no ser así, se puede perjudicar mucho el edificio. Eso sí, todo ello se pueden combinar con técnicas modernas, que en casos muy determinados sí son beneficiosas.
-¿Es consciente el malagueño del patrimonio que tiene el Centro Histórico?
-Yo que creo no, aunque actualmente se ha evolucionado un poco y se están dando a conocer algunos edificios. Pero el problema principal es que en muchas ocasiones no se respeta. Porque, por ejemplo, en san Felipe Neri, la fachada que acaba de ser rehabilitada y que cuenta con muchos motivos geométricos se encuentra ya llena de pintadas vandálicas. En San Juan Bautista y en el Palacio Episcopal ocurre lo mismo. Los autores de estas pintadas están atentando contra el patrimonio artístico de todos los malagueños, porque estos edificios son un bien de todos. En otras ciudades de España y en países como Italia, plagada de monumentos, no sucede lo mismo. Es una cuestión de educación.
-¿Cuáles son para usted los edificios más valiosos del Centro Histórico?
-Por su puesto, la Catedral, en primer lugar, y en segundo, el Palacio de la Aduana. También me gusta mucho todo el entorno del Museo Picasso.
-Las complejas obras de rehabilitación necesitarán profesionales especializados.
-Pues sí, hay una serie de oficios que se han perdido con el paso del tiempo, como por ejemplo buenos carpinteros de los blancos, que eran los que hacían las estructuras de las cubiertas. Hay muy pocos en esta profesión que se atrevan a hacer este tipo de obras. Yo reivindico también a los maestros revocadores de cal, que en el enfoscado hacen simulaciones de otros materiales.