Llevará la aprobación de éste y otros dos acuerdos a la comisión de Urbanismo · Las actuaciones reportarán unos 90 millones
El equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Málaga tiene previsto aprobar el próximo miércoles, en la comisión de Urbanismo, los convenios urbanísticos de Arraijanal y La Térmica, con los que se permitirá la construcción de viviendas en sendos parajes, a pesar de que existen serias dudas respecto a la definitiva inclusión de estas actuaciones en la aprobación definitiva del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) de la ciudad.
De un lado, la Junta de Andalucía ya ha mostrado su rechazo rotundo en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) a la posibilidad de construir en los suelos situados junto a Guadalmar, y de otro, la ocupación de la parcela de la antigua central térmica está a la espera de recibir el visto bueno de Aviación Civil.
A pesar de ello, los populares dan un paso adelante y formalizarán los citados acuerdos, que le reportarán a las arcas municipales unos 86 millones de euros. No obstante, el cobro de esta cuantía está supeditado a que las empresa Vallehermoso pueda ejecutar 664 viviendas en la zona de Arraijanal y Nueva Marina Real Estate otras 773 en La Térmica, al tiempo que dispondrá de 10.500 metros para un hotel, 12.000 para oficinas y 16.148 de comercial. A estos dos convenios se suma un tercero, el de Hipercor, que también recibirá luz verde.
La actuación ha pillado por sorpresa a los grupos de la oposición municipal, PSOE e IU, que desde el mismo instante en que se plantearon los acuerdos mostraron su crítica a los mismos. El portavoz de IU, Pedro Moreno Brenes, denunció no sólo el hecho de que sean impulsados cuando no hay garantía de que salgan adelante, sino además el que fuesen incorporados a la documentación del Plan General aprobado de manera provisional sin que el Pleno los aprobase previamente. "Es como decir que se han plegado a los intereses de las empresas antes de que incluso exista formalmente el convenio", sentenció.
Asimismo, aludió a la existencia de un informe elaborado por el interventor en el que éste "cuestiona" la posibilidad de emplear el dinero que pretende recibir el equipo de gobierno en obras de reurbanización, a las que en una parte va destinado. "También señala algunos errores, pide informes y advierte de que el posible sobrecoste en la ejecución de las obras previstas deberá preverse en los presupuestos municipales", dijo. "Esta gente vende el patrimonio y destinan lo que reciben a usos que no están contemplados en la legislación vigente", comentó.
Por su parte, el concejal del PSOE Sergio Brenes, anunció que preguntará al secretario del Ayuntamiento, Venancio Gutiérrez, sobre el procedimiento seguido por el equipo de gobierno del PP.
El equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Málaga tiene previsto aprobar el próximo miércoles, en la comisión de Urbanismo, los convenios urbanísticos de Arraijanal y La Térmica, con los que se permitirá la construcción de viviendas en sendos parajes, a pesar de que existen serias dudas respecto a la definitiva inclusión de estas actuaciones en la aprobación definitiva del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) de la ciudad.
De un lado, la Junta de Andalucía ya ha mostrado su rechazo rotundo en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) a la posibilidad de construir en los suelos situados junto a Guadalmar, y de otro, la ocupación de la parcela de la antigua central térmica está a la espera de recibir el visto bueno de Aviación Civil.
A pesar de ello, los populares dan un paso adelante y formalizarán los citados acuerdos, que le reportarán a las arcas municipales unos 86 millones de euros. No obstante, el cobro de esta cuantía está supeditado a que las empresa Vallehermoso pueda ejecutar 664 viviendas en la zona de Arraijanal y Nueva Marina Real Estate otras 773 en La Térmica, al tiempo que dispondrá de 10.500 metros para un hotel, 12.000 para oficinas y 16.148 de comercial. A estos dos convenios se suma un tercero, el de Hipercor, que también recibirá luz verde.
La actuación ha pillado por sorpresa a los grupos de la oposición municipal, PSOE e IU, que desde el mismo instante en que se plantearon los acuerdos mostraron su crítica a los mismos. El portavoz de IU, Pedro Moreno Brenes, denunció no sólo el hecho de que sean impulsados cuando no hay garantía de que salgan adelante, sino además el que fuesen incorporados a la documentación del Plan General aprobado de manera provisional sin que el Pleno los aprobase previamente. "Es como decir que se han plegado a los intereses de las empresas antes de que incluso exista formalmente el convenio", sentenció.
Asimismo, aludió a la existencia de un informe elaborado por el interventor en el que éste "cuestiona" la posibilidad de emplear el dinero que pretende recibir el equipo de gobierno en obras de reurbanización, a las que en una parte va destinado. "También señala algunos errores, pide informes y advierte de que el posible sobrecoste en la ejecución de las obras previstas deberá preverse en los presupuestos municipales", dijo. "Esta gente vende el patrimonio y destinan lo que reciben a usos que no están contemplados en la legislación vigente", comentó.
Por su parte, el concejal del PSOE Sergio Brenes, anunció que preguntará al secretario del Ayuntamiento, Venancio Gutiérrez, sobre el procedimiento seguido por el equipo de gobierno del PP.
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