El devenir del edificio del antiguo cine Astoria se parece cada vez más a una película de suspense en la que es muy complicado saber cuál va a ser el siguiente episodio de la historia. Por el momento, el capítulo actual del largometraje está marcado por el lamentable estado de abandono de un inmueble que se encuentra enclavado en plena ruta turística picassiana, ya que constituye una de las fachadas de la céntrica plaza de la Merced.
La historia comenzó con un convenio de la promotora Baensa con el Ayuntamiento para ceder parte del espacio de la futura promoción de viviendas de lujo, a la que dará paso el cine, a la Fundación Picasso. Sin embargo, el rechazo de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía al proyecto planteado dio al traste con el acuerdo y supuso una demora en el inicio de las casas, a las que ha cogido de lleno la crisis del sector inmobiliario.
Nuevo diseño
Desde la promotora informaron de que hace ya unos seis meses que presentaron el proyecto definitivo a la Gerencia Municipal de Urbanismo para obtener la licencia de obras, una vez descartada la operación para ceder parte del espacio al Consistorio. Sin embargo, el diseño todavía sigue en un proceso de revisión por parte de los técnicos municipales que no tiene un final cierto. No obstante, el concejal de Urbanismo, Manuel Díaz, señaló que se está trabajando para que sea informado «cuanto antes».
El compás de espera sigue marcado por la pegada indiscriminada de carteles en las paredes del cine y la entrada de indigentes en su interior, cuestión que se ha intentado evitar recientemente con el sellado de sus puertas. Fuentes de Urbanismo comentaron que van a requerir a la propiedad que adopte más medidas para mejorar el aspecto del edificio -barajan la colocación de unas lonas-, pero lo que ésta reclama es la licencia de obras para poder proceder a su demolición en el menor plazo de tiempo posible. Se acercará entonces el desenlace de la última película en el Astoria.
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