Todas las grandes firmas de centros comerciales quieren construir en la ciudad
PRINCESA SÁNCHEZ. MARBELLA El ladrillo resucita en Marbella. Su Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), aún pendiente de ser norma obligatoria, ya comienza a insuflar oxígeno entre los órganos promotores más desvalidos en los últimos tiempos de crisis económica. La Delegación de Urbanismo de la localidad lo ha comprobado, al pasar de la parálisis total al movimiento acelerado. Tanto inversores españoles como extranjeros están ahora interesados en comprar Marbella.
El pasado 29 de enero se produjo el "punto de inflexión" que todos esperaban, destacó a este diario el concejal Pablo Moro. Aquel día, la Comisión de Ordenación del Territorio y Urbanismo de Andalucía aprobaba el nuevo planeamiento, con una única abstención ecologista. La Junta de Andalucía y el Ayuntamiento firmaban un proyecto de vida polémico pero definitivo para la ciudad en los próximos ocho años. Habían terminado 24 de incertidumbre urbanística. El teléfono comenzaba a sonar.
Los primeros en llamar al Ayuntamiento fueron los promotores que tienen cuentas pendientes con la localidad por haber construido en contra de la legalidad. "Ya hemos negociado las compensaciones con 15 promotores", avanzó Moro. Entre ellos, el impaciente propietario del hotel Senator y El Corte Inglés. La primera impresión de todos ellos es que las compensaciones son "excesivas", reconoció el edil.
Los más ´conocidos´ están por llegar. El empresario imputado en la operación ´Malaya´ Tomás Olivo aún no ha pasado por la oficina de Planeamiento, según Moro. Y con José Ávila Rojas "es difícil negociar ahora". Sencillamente, porque está en la cárcel. Pero, ojo, que todo se andará.
Inversores
El interés en construir de nuevo en la localidad se ha despertado y el Consistorio ya ha recibido propuestas de todo tipo. Hay tres o cuatro inversores que quieren construir colegios privados, otros tantos que planean implantar clínicas y muchos, "especialmente extranjeros", que se decantan por los geriátricos o residencias para mayores.
"Todas las grandes firmas comerciales se han puesto en contacto con nosotros para saber de qué suelos pueden disponer para implantar grandes superficies", explicó Moro, consciente de que la "auténtica avalancha" aún permanece rezagada.
La oficina de atención al inversor, en la que trabajan la práctica totalidad de los técnicos de Urbanismo desde enero, recibe peticiones de información de todo tipo. Hasta la de un inversor interesado en construir un circuito de velocidad, añadió el concejal.
El nuevo PGOU regula 16.500 viviendas construidas irregularmente y más de mil comercios. Sus propietarios aguardan el trámite definitivo. Una vez cumplido, Moro espera verles para solicitar licencias de primera ocupación y de apertura. Constituirán la "avalancha" que esperan.
Marbella será la primera ciudad andaluza de más de 100.000 habitantes adaptada a la Ley de Ordenación Urbanística. Quizá por ello, será la primera en ver los famosos ´brotes´ color ladrillo.
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