La Agencia Pública de Puertos de Andalucía recibe solo dos ofertas para hacerse con la ampliación y explotación del recinto náutico
16.03.2011 -
Vista del puerto de La Bajadilla. :: JOSELE-LANZA
Consorcio Unión Temporal de Empresarios Marina Internacional de Marbella y UTE (Unión Temporal de Empresas) Nasir Bin Abdullah & Sons y Ayuntamiento de Marbella. Entre estas dos propuestas tendrá que elegir la Junta de Andalucía a la entidad que dará forma a la esperada ampliación del puerto deportivo y pesquero de La Bajadilla y que se encargará de explotar el recinto náutico durante los próximos 40 años. La Consejería de Obras Públicas confirmó ayer que solo competirán en el concurso público los dos proyectos que ya habían trascendido en los últimos días. De una parte Marina Internacional de Marbella, impulsado por un grupo de empresas locales, que defiende su propuesta como la única que garantiza la llegada de cruceros y que prevé una inversión de cien millones de euros.
De otra, la UTE Nasir Bin Abdullah & Sons y Ayuntamiento de Marbella, que tiene detrás al jeque catarí Abdullah Al-Thani, propietario del Málaga, y que además va de la mano en una unión de empresas con el propio Consistorio marbellí, a través de su sociedad municipal Puerto Deportivo, que gestiona la marina del centro de la ciudad. En este caso, lo poco que ha trascendido es que dará cobijo a cruceros medios y que su presupuesto superará holgadamente el del consorcio local, aunque no se conoce la cifra exacta.
A los técnicos del Gobierno andaluz le quedan ahora por delante semanas, incluso meses, para escudriñar cada uno de los pormenores, tanto los económicos como los técnicos, antes de determinar cuál es la oferta más ventajosa y poner nombre a la futura concesionaria del puerto de La Bajadilla. Según las fuentes consultadas, la complejidad de los informes dilatará la adjudicación, que no se producirá antes de las elecciones municipales. Desde la Junta ya han anunciado que se primará el criterio de calidad técnica de la propuesta frente al económico.
Experiencia en el puerto
La competencia se prevé reñida. Ambos grupos empresariales han tomado posiciones en los últimos días. Mientras que el consorcio local presentó su proyecto la semana pasada en una rueda de prensa en la que sacó pecho de que se trataba de la mejor propuesta para Marbella, la UTE liderada por el jeque dio un golpe de timón al unir sus fuerzas con las del Ayuntamiento, que no tendrá que hacer ningún desembolso. Solo aportará su experiencia en la gestión del Puerto Deportivo, otra de las cuatro marinas que jalonan el litoral.
La Junta recordó ayer que esta actuación es la primera que sale adelante financiada bajo la fórmula de la colaboración público-privada. En suma, supone que el futuro concesionario redactará el proyecto constructivo, realizará las obras con sus propios recursos y explotará las instalaciones en tierra y en agua durante 40 años, plazo en el que amortizará la inversión. Las empresas han tenido por tanto margen de maniobra para plasmar en el papel su diseño para el puerto. La Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA) admite variantes sobre el proyecto básico siempre que respete los límites marcados por Costas y la declaración de impacto ambiental. A grandes rasgos, la obra consistirá en una ampliación exterior del puerto con una nueva dársena deportiva, varadero y muelle para cruceros, así como una nueva fachada portuaria con usos más urbanos, incluida la zona comercial. En la licitación se marcaba un presupuesto inicial estimado de 77 millones de euros, que ambas han superado, y 400 nuevos atraques que se sumarán a los 270 actuales. Una cifra que también tiene visos de variar.
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