Un estudio de la Junta concluye que el 41% de las casas necesarias en la próxima década deben ser a precio asequible · El mayor déficit lo tiene Málaga capital, con una demanda de 21.000 pisos sociales
La necesidad de Vivienda de Protección Oficial (VPO) en la provincia de Málaga es más que patente. El estudio de demanda realizado por la Junta de Andalucía en el marco del Pacto por la Vivienda suscrito hace unas semanas con los ayuntamientos y los agentes sociales y económicos de la región concluye que Málaga necesitará de la construcción de algo más de 53.000 pisos a precio asequible para satisfacer, en el plazo de unos diez años, la necesidad de la población, especialmente de los jóvenes con entre 20 y 34 años. O lo que es lo mismo, sería necesario edificar una casa protegida por cada seis jóvenes, de acuerdo con el censo actual.El escenario dibujado en el documento elaborado por el Instituto de Estudios de Andalucía (IESA) indica que en el horizonte de la próxima década cuatro de cada diez casas nuevas en territorio malagueño deberían ser protegidas. La realidad que apunta la Administración autonómica en este análisis se aleja de manera sustancial de las previsiones de crecimiento residencial que hasta no hace mucho contemplaban los municipios, cuyas aspiraciones elevaban la cuantía final de viviendas nuevas a más de 500.000. Frente a esta imagen alejada de las exigencias fijadas por la Consejería de Obras Públicas en el Plan de Ordenación Territorial de Andalucía (POTA), el informe elaborado cifra en 130.694 las edificaciones necesarias para responder de forma adecuada a la demanda en la provincia. Y de ellas, 53.634, el 41 por ciento, serían VPO. La fotografía que permite realizar el desglose de los datos sitúa a Málaga y su área metropolitana como el espacio geográfico en el que los déficits residenciales son mayores, con una demanda de 30.243 construcciones. En este sentido, Málaga ciudad destaca por encima del resto de municipios. Con una población joven algo superior a las 141.511 personas (el 25 por ciento del total de los habitantes de la ciudad), la capital de la Costa del Sol requiere de casi 21.000 VPO para superar las actuales dificultades a las que se enfrenta su población. En proporción, las exigencias actuales equivalen a una vivienda social por cada siete jóvenes.Esta cifra está muy alejada de las previsiones en materia de vivienda social que hace el Ayuntamiento de la localidad en la revisión de su Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU), cuyo horizonte temporal es, aproximadamente, de diez años. De acuerdo con el contenido del documento, el equipo redactor propone la ejecución de unas 13.000 VPO, mientras que la reserva para vivienda de renta libre supera las 70.000. Sin embargo, la demanda global en la ciudad, según la Junta, es de 51.600 casas. A Málaga se suman Torremolinos, con 2.138 VPO; Benalmádena, 1.746, y Rincón de la Victoria, 1.181, entre otras.Tras el área metropolitana de Málaga, la otra zona con más necesidad es la Costa del Sol, donde el trabajo del IESA calcula la vivienda protegida necesaria en 12.105, de las que 4.714 se localizarían en Marbella; 2.281, en Fuengirola; 2.076, en Mijas, y 2.248, en Estepona, entre otros municipios.Los primeros pasos en este objetivo ya han sido dados por el departamento dirigido por Concepción Gutiérrez, que ha suscrito sendos convenios con seis municipios de la Costa del Sol y del interior, como son Benalmádena, Estepona, Mijas, Rincón de la Victoria, Coín y Antequera para impulsar la construcción de casi 10.000 pisos sociales, así como con la Diputación Provincial para ejecutar más de 9.000 viviendas en los pueblos de menor tamaño.
La necesidad de Vivienda de Protección Oficial (VPO) en la provincia de Málaga es más que patente. El estudio de demanda realizado por la Junta de Andalucía en el marco del Pacto por la Vivienda suscrito hace unas semanas con los ayuntamientos y los agentes sociales y económicos de la región concluye que Málaga necesitará de la construcción de algo más de 53.000 pisos a precio asequible para satisfacer, en el plazo de unos diez años, la necesidad de la población, especialmente de los jóvenes con entre 20 y 34 años. O lo que es lo mismo, sería necesario edificar una casa protegida por cada seis jóvenes, de acuerdo con el censo actual.El escenario dibujado en el documento elaborado por el Instituto de Estudios de Andalucía (IESA) indica que en el horizonte de la próxima década cuatro de cada diez casas nuevas en territorio malagueño deberían ser protegidas. La realidad que apunta la Administración autonómica en este análisis se aleja de manera sustancial de las previsiones de crecimiento residencial que hasta no hace mucho contemplaban los municipios, cuyas aspiraciones elevaban la cuantía final de viviendas nuevas a más de 500.000. Frente a esta imagen alejada de las exigencias fijadas por la Consejería de Obras Públicas en el Plan de Ordenación Territorial de Andalucía (POTA), el informe elaborado cifra en 130.694 las edificaciones necesarias para responder de forma adecuada a la demanda en la provincia. Y de ellas, 53.634, el 41 por ciento, serían VPO. La fotografía que permite realizar el desglose de los datos sitúa a Málaga y su área metropolitana como el espacio geográfico en el que los déficits residenciales son mayores, con una demanda de 30.243 construcciones. En este sentido, Málaga ciudad destaca por encima del resto de municipios. Con una población joven algo superior a las 141.511 personas (el 25 por ciento del total de los habitantes de la ciudad), la capital de la Costa del Sol requiere de casi 21.000 VPO para superar las actuales dificultades a las que se enfrenta su población. En proporción, las exigencias actuales equivalen a una vivienda social por cada siete jóvenes.Esta cifra está muy alejada de las previsiones en materia de vivienda social que hace el Ayuntamiento de la localidad en la revisión de su Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU), cuyo horizonte temporal es, aproximadamente, de diez años. De acuerdo con el contenido del documento, el equipo redactor propone la ejecución de unas 13.000 VPO, mientras que la reserva para vivienda de renta libre supera las 70.000. Sin embargo, la demanda global en la ciudad, según la Junta, es de 51.600 casas. A Málaga se suman Torremolinos, con 2.138 VPO; Benalmádena, 1.746, y Rincón de la Victoria, 1.181, entre otras.Tras el área metropolitana de Málaga, la otra zona con más necesidad es la Costa del Sol, donde el trabajo del IESA calcula la vivienda protegida necesaria en 12.105, de las que 4.714 se localizarían en Marbella; 2.281, en Fuengirola; 2.076, en Mijas, y 2.248, en Estepona, entre otros municipios.Los primeros pasos en este objetivo ya han sido dados por el departamento dirigido por Concepción Gutiérrez, que ha suscrito sendos convenios con seis municipios de la Costa del Sol y del interior, como son Benalmádena, Estepona, Mijas, Rincón de la Victoria, Coín y Antequera para impulsar la construcción de casi 10.000 pisos sociales, así como con la Diputación Provincial para ejecutar más de 9.000 viviendas en los pueblos de menor tamaño.
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