El edil de Urbanismo insiste en un tercer hospital en la zona Este, a lo que se niega el SAS. Habrá otra reunión en mayo
MIGUEL FERRARY. MÁLAGA La idea de construir un macrohospital es lo menos parecido a un puente entre las administraciones. La Junta y el Ayuntamiento presentan posturas enfrentadas sobre este asunto y las reuniones mantenidas para buscar un acuerdo sólo han servido para poner de relieve estas diferencias. La última constatación de este hecho fue ayer, durante un nuevo encuentro en el que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) rechazó la propuesta municipal de construir un tercer hospital en la zona Este de la ciudad. Pero el Consistorio insiste: "Creemos que es compatible el macrohospital con otro en la zona Este que atendería a toda esa parte de la capital, así como a Rincón de la Victoria", asegura el edil de Urbanismo, Manuel Díaz, quien recalca que seguirán pidiendo este equipamiento.
"El macrohospital que plantean sólo cuenta con 350 camas más que las actuales y creemos que es compatible con otro en la zona Este", afirma Manuel Díaz, al tiempo que aclara que esperan continuar con la negociación en la primera semana de mayo.
Otro punto de fricción es el destino de los actuales hospitales (Materno, Civil y Carlos Haya), que la Administración andaluza pide que se recalifiquen para destino residencial y así financiar la construcción del macrohospital. Sin embargo, la nueva propuesta del SAS establece un cambio. El secretario general del SAS, Jesús Huertas, insistió en que el nuevo planteamiento de la Junta sería "mantener para uso sanitario y de equipamiento social dos de los cuatro edificios que componen el actual complejo Carlos Haya" (que están protegidos) y el edificio del Civil.
Manuel Díaz, aunque valora este cambio de postura, insiste en que no es lógico "perder equipamiento para saturar esos barrios con más viviendas" e insiste en que se queden con usos que pueden ser lucrativos, como un geriátrico o equipamientos para la ciudad.
Otro punto que sigue abriendo heridas es la ubicación definitiva de este futuro macrohospital. En este punto, también el SAS ha flexibilizado su postura un poco, aceptando que no vaya en el Lagar de Oliveros, donde hay importantes proyectos de VPO. Ahora también plantea que pueda ir en el entorno, como cerca de Parcemasa o de Los Asperones, donde, como apunta Manuel Díaz, "llega el metro y es más accesible".
No obstante, la nueva reunión prevista para primeros de mayo permitirá conocer hasta qué punto estos pequeños avances abren una vía de entendimiento o bien nuevos frentes donde desarrollar el combate institucional.
MIGUEL FERRARY. MÁLAGA La idea de construir un macrohospital es lo menos parecido a un puente entre las administraciones. La Junta y el Ayuntamiento presentan posturas enfrentadas sobre este asunto y las reuniones mantenidas para buscar un acuerdo sólo han servido para poner de relieve estas diferencias. La última constatación de este hecho fue ayer, durante un nuevo encuentro en el que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) rechazó la propuesta municipal de construir un tercer hospital en la zona Este de la ciudad. Pero el Consistorio insiste: "Creemos que es compatible el macrohospital con otro en la zona Este que atendería a toda esa parte de la capital, así como a Rincón de la Victoria", asegura el edil de Urbanismo, Manuel Díaz, quien recalca que seguirán pidiendo este equipamiento.
"El macrohospital que plantean sólo cuenta con 350 camas más que las actuales y creemos que es compatible con otro en la zona Este", afirma Manuel Díaz, al tiempo que aclara que esperan continuar con la negociación en la primera semana de mayo.
Otro punto de fricción es el destino de los actuales hospitales (Materno, Civil y Carlos Haya), que la Administración andaluza pide que se recalifiquen para destino residencial y así financiar la construcción del macrohospital. Sin embargo, la nueva propuesta del SAS establece un cambio. El secretario general del SAS, Jesús Huertas, insistió en que el nuevo planteamiento de la Junta sería "mantener para uso sanitario y de equipamiento social dos de los cuatro edificios que componen el actual complejo Carlos Haya" (que están protegidos) y el edificio del Civil.
Manuel Díaz, aunque valora este cambio de postura, insiste en que no es lógico "perder equipamiento para saturar esos barrios con más viviendas" e insiste en que se queden con usos que pueden ser lucrativos, como un geriátrico o equipamientos para la ciudad.
Otro punto que sigue abriendo heridas es la ubicación definitiva de este futuro macrohospital. En este punto, también el SAS ha flexibilizado su postura un poco, aceptando que no vaya en el Lagar de Oliveros, donde hay importantes proyectos de VPO. Ahora también plantea que pueda ir en el entorno, como cerca de Parcemasa o de Los Asperones, donde, como apunta Manuel Díaz, "llega el metro y es más accesible".
No obstante, la nueva reunión prevista para primeros de mayo permitirá conocer hasta qué punto estos pequeños avances abren una vía de entendimiento o bien nuevos frentes donde desarrollar el combate institucional.
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