martes, 28 de julio de 2009

La nueva terminal del aeropuerto será puesta a prueba por 2.500 figurantes (Málaga Hoy)

Las simulaciones de funcionamiento de las instalaciones comenzarán en el último trimestre de 2009 y se emplearán 4.000 maletas para dar realismo · Los participantes no podrán intervenir más de dos veces

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Aspecto que presentaban, ayer, los trabajos de la nueva terminal del aeropuerto de Málaga.



Los máximos responsables de Aena empiezan a contar los días para que la puesta en servicio de la nueva terminal del aeropuerto de Málaga sea una realidad. Con la vista puesta en minimizar los errores y problemas de funcionamiento de las instalaciones, en las que se han invertido alrededor de 260 millones de euros, el organismo estatal prevé poner a prueba los sistemas de atención a los pasajeros y los dispositivos de control, entre otros, a lo largo del último trimestre de 2009, tarea en la que participarán alrededor de 2.500 figurantes.

Será a estos personajes anónimos a los que corresponderá, de inicio, juzgar el funcionamiento del nuevo edificio aeroportuario. Desde Aena precisaron que las pruebas de explotación incluirán un total de 22 sesiones, ocho de las cuales se denominan básicas, es decir, con personal del aeropuerto, y las 14 restantes serán pruebas globales, con figurantes.

Los datos aportados por este ente público elevan a 2.500 los figurantes que formarán parte del dispositivo, al tiempo que se utilizarán 4.000 maletas para dar toda la realidad posible al procedimiento. Asimismo, explicaron a este periódico que en el modus operandi contemplado para examinar las instalaciones "no podrá participar una misma persona en más de dos sesiones, con el fin de evitar que se familiarice con el aeropuerto". "Se trata, precisamente, de ver cómo responden personas que no conocen la instalación para poder detectar las mejoras que es necesario introducir", indicaron.

La experiencia, pionera en el caso de la capital de la Costa del Sol, viene a emular lo que hace apenas tres meses ocurrió en la nueva terminal T1 del aeropuerto de El Prat, en Barcelona. En las simulaciones realizadas en el aeródromo de la Ciudad Condal la cifra de figurantes fue de unos 6.000, seleccionados de entre casi 15.000 voluntarios que quisieron participar en esta acción. Tomando como referencia lo sucedido en este aeródromo, es posible hacerse una idea de lo que sucederá en Málaga. Tras las sesiones, que en Barcelona se realizaron martes y jueves, entre las 8:30 y las 15:30, cada figurante cumplimentó un cuestionario con preguntas relacionadas con el desarrollo de las mismas.

El realismo de lo que se desarrolló fue tal que los pasajeros que tenían que coger un vuelo de salida iniciaron la prueba en el hall de facturación, donde despacharon su equipaje y recibieron la tarjeta de embarque. Tras superar los filtros de seguridad, utilizaron la señalización estática y dinámica para localizar la puerta de la que partía su vuelo. Mientras, los que simularon llegar al aeropuerto se dirigieron hacia la sala de recogida de equipaje desde los puntos de llegada y, una vez localizaron las maletas, se dirigieron a la salida para buscar un medio de transporte en el que abandonar las instalaciones.

La previsión es que la nueva terminal de Málaga sea abierta al público a principios de 2010, aunque la misma irá entrando en funcionamiento de manera paulatina hasta estar a pleno rendimiento antes de verano. El grueso de la obra de ejecución está ya casi ultimado, estando ya preparados los 86 puestos de facturación de maletas que tendrá esta instalación, a lo que se suma un dique de embarque de 34 metros de ancho y 240 metros de longitud, que se dedicará a los vuelos de aviones dentro de la Unión Europea y con capacidad para atender 12 aeronaves con acceso directo a las aeronaves.

Esta actuación va a permitir que el aeropuerto de Málaga duplique su capacidad actual, alcanzando los 20 millones de viajeros anuales. De los 4.500 usuarios a la hora que se procesan en este momento se pasará a unos 9.000. Asimismo, el edificio dispondrá de un área reservada para las compañías, localizada en la primera planta, mientras otras dos serán de uso de Aena. A todo ello hay que sumar una superficie comercial de 18.000 metros cuadrados, distribuidos en 21 locales de restauración, 24 tiendas y otros cinco para distintos servicios a los pasajeros.

La maquinaria de la nueva terminal se irán engranando con el paso de los meses, aunque es previsible que a mediados de 2010 esté resuelto el acceso de los pasajeros a la terminal de tren y coche que se ejecuta de manera subterránea y a la que llegarán los trenes de cercanías y, a medio plazo, los trenes de alta velocidad. La previsión es que en los primeros meses del próximo ejercicio ya sea abierto el túnel ferroviario de cuatro kilómetros entre Los Prados y el aeropuerto.

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