Primera condena al promotor del centro hispano-ruso (Málaga Hoy)

Un juzgado le impone una multa de 15 euros diarios durante 50 días por una falta de desobediencia al esquivar el precinto fijado por la Policía Local a una obra suya

S. SÁNCHEZ / MÁLAGA | ACTUALIZADO 22.07.2010 - 01:00

Vista de la vivienda del promotor y de las actuaciones realizadas sin licencia en estos 12 años.

Tras 12 años levantando de manera indiscriminada sobre suelo no urbanizable apartamentos, pistas de tenis, piscinas, el promotor del centro hispano-ruso, Vladimir Beniachvili, se topa con la primera condena de los tribunales. Aunque la misma tiene más de simbólico que de efectivo, puesto que la pena que se le impone es el pago de 15 euros diarios, durante 50 días. Es decir, de 750 euros.

Y la misma nada tiene que ver con los más de 6.000 metros cuadrados de obras ilegales que ha ejecutado en Pinares de San Antón desde finales de 1999, sino con un falta por desobediencia en la que incurrió cuando esquivó el precinto que la Policía Local fijó en una zona próxima a su vivienda, donde había efectuado un importante movimiento de tierra sin licencia. La infracción, según confirmó la jefa del departamento de Disciplina Urbanística, Teresa Domingo, fue comunicada por la Policía Local al juzgado, que finalmente ha fallado en estos términos. Los hechos denunciados en su momento tuvieron lugar a mediados de abril.

A esta acción judicial hay que sumar la reciente decisión del Juzgado de instrucción número 5 de Málaga de ordenar la paralización de todas las obras del promotor, según informó ayer La Opinión. Una determinación que ya reclamó a finales del pasado año la Fiscalía en un documento en el que, además, aprecia cómo la Gerencia de Urbanismo concedió varias licencias de obras al empresario a pesar de haberle abierto varios expedientes urbanísticos por presuntas irregularidades.

Sobre este asunto, Domingo informó de que en el departamento consta que todas las licencias que se han podido conceder "se corresponden con suelo urbano", aunque posteriormente se comprobó que el promotor realizaba obras sobre suelo no urbanizable. "Eso es lo que motivó que haya abierto expediente de infracción", comentó.

Al margen de la vía judicial, que parece haber acelerado, la Gerencia de Urbanismo lleva desde finales del año paso una amplia campaña con el objetivo de lograr la demolición de lo edificado de manera irregular. En este periodo, el departamento municipal ha impuesto hasta cuatro sanciones coercitivas por negarse a derribar lo construido y otras cuatro por un movimiento de tierra, lo que suma una cuantía de 425.000 euros.

Entre las numerosas actuaciones del promotor destacan dos edificaciones, una de ellas con cafetería, seis apartamentos y sala de instalaciones, con 529 metros construidos, y otra compuesta de hasta cuatro plantas, con cinco apartamentos, dúplex, un gimnasio, varias saunas y cuatro viviendas más y una zona común que incorpora una piscina, así como una amplia terraza mirador y una vivienda con salón, entre otros.