El miembro de la Consejería de Vivienda abogó por mantener la población en los centros históricos de los municipios
MAYTE CORTÉS / VÉLEZ-MÁLAGA | ACTUALIZADO 22.07.2010 - 01:00Mantener a la población en el centro histórico de la ciudad es la única forma de conservar sus tradiciones y su cultura. La única manera de que esté viva. Fuerzas políticas, sindicatos, agentes sociales, profesionales y vecinos deben encontrar el consenso para hacer que el casco urbano sea habitable. Esta es la opinión de José Ildefonso Rodríguez Baladí, jefe del servicio de Rehabilitación de Viviendas de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía que ayer estuvo en Vélez-Málaga en los Cursos de Verano organizados por la Universidad de Málaga. "La recuperación residencial de la ciudad histórica es fundamental de cara a plantear su revitalización. Procesos de recuperación de centro histórico que no contemplen el uso residencial acaban convirtiendo a la ciudad en un parque temático: la gente de fuera viene a visitarla, pero a determinadas horas se van y se queda vacío", añade Rodríguez Baladí quien cree que "conservar es fundamental para mantener la habitabilidad, para mantener viva una ciudad y que no sea un escenario que se visita".
Con su ponencia Una larga travesía: la rehabilitación como conservación de los modos de vida, hizo un recorrido a lo largo de la experiencia en materia de rehabilitación que ha desarrollado la administración autonómica desde 1984. Para José Ildefonso, en este momento es "especialmente interesante teniendo en cuenta que la crisis ajusta los presupuestos públicos y es necesario evaluar y revisar todo lo que se ha hecho en esta etapa y empezar a pensar cómo salir y hacia donde mirar". El responsable autonómico de estos programas considera que hay que potenciar "la ciudad construida" frente a otros crecimientos. "Ha habido una dinámica loca de crecer y expandirse cuando la rehabilitación es una alternativa que provoca crecimientos interiores, recuperando áreas urbanas que están en proceso de degradación", expresó el ponente quien cree que además este modelo es más sostenible que el otro en el que se consume espacio, suelo o agua, Además requiere de la creación de servicios o de redes de movilidad. "No es sólo un motor económico sino que además mira hacia modelos más sostenibles de intervención en la ciudad", asegura Rodríguez Baladí quien cree que ahora, con la parálisis inmobiliaria, la rehabilitación aparece como alternativa para la creación de empleo. "Con inversiones similares, la rehabilitación requiere de más mano de obra que la construcción de primera planta", apunta el ponente.
Con respecto a los problemas de accesibilidad que presenta vivir en el centro histórico, reconoció que hasta hace una década "hemos vivido en la cultura del coche". "Con el deterioro del parque residencial, las familias han preferido buscar una vivienda construida en serie antes que seguir viviendo en lugares con falta de habilitabilidad", apostilla Rodríguez Baladí quien también reconoce que por otro lado, "la iniciativa inversora ha copado los centros y han subido los precios, expulsado a la población más popular". Así, según dijo los programas públicos de rehabilitación pretenden incidir en facilitar el mantenimiento de la población en sus lugares de origen, "allí donde los procesos no han provocado un abandono importante".
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