Los tribunales dan la razón a la firma, que reclamó una compensación por no poder construir 230 viviendas en El Perchel porque el Ayuntamiento tardó cuatro años más de lo previsto en trasladar el mercado de El Carmen
SEBASTIÁN SÁNCHEZ / MÁLAGA | ACTUALIZADO 08.06.2012 - 01:00
Varapalo judicial para el Ayuntamiento de Málaga. La empresa Baensa acaba de recibir el aval de los tribunales en la demanda que interpuso contra la Gerencia de Urbanismo por obstaculizarle durante casi cuatro años la construcción de una promoción de 230 viviendas en una parcela de El Perchel. El fallo obliga al equipo de gobierno del PP a compensar con 18 millones de euros a la firma, que no pudo impulsar esta edificación porque el Consistorio incumplió el compromiso de trasladar el mercado de El Carmen a finales de 2007, paso que no formalizó hasta octubre de 2011.
Según informaron a Málaga Hoy fuentes próximas al proyecto, la determinación adoptada en primera instancia respalda las tesis mantenida por la promotora, que incluso se vio obligado a devolver hasta tres millones de euros a los clientes que reservaron una vivienda. Ante este revés, el delegado de Ordenación del Territorio y Vivienda, Diego Maldonado, dijo respetar las decisiones judiciales, pero anunció que recurrirá el fallo.
La demanda de la que ahora se conoce el fallo fue presentada por Baensa, a la que el Consistorio compró la manzana de los antiguos cines Astoria y Victoria por unos 20 millones de euros y con la que aún negocia el abono de otros 6 millones en concepto de otros gastos, en febrero del año 2011. La firma, de origen vasco, acabó dando este paso tras ver cómo la intervención residencial que preveía levantar en Callejones del Perchel, tras adquirir el suelo a grupo Lar (con una inversión prevista de 70 millones), se vio afectada por el retraso en la demolición y traslado del antiguo mercado.
Según fuentes de la promotora, el compromiso asumido en su día por Urbanismo y grupo Lar, posteriormente asumido con Baensa, era el de facilitar este cambio de localización antes de finales de 2007, sin que ello tuviese lugar hasta hace unos meses. Esta circunstancia, según la empresa afectada, imposibilitó que el proyecto avanzase conforme a lo previsto, obligándola incluso a desvincularse de la intervención ante la incapacidad para afrontar los pagos del préstamo concedido por Unicaja para el desarrollo de la actuación.
Antes de acudir a la vía judicial, los responsables de Baensa, en marzo de 2010, presentaron un escrito de responsabilidad patrimonial por los mencionados 18,3 millones, que fue inadmitido por el gerente del organismo en junio de ese mismo año al entender que los problemas a los que alude la empresa formaban parte de "una cuestión contractual".
La sentencia, aunque no definitiva, sí puede suponer un respiro para una firma afectada de forma severa por la crisis económica y por el conflicto con la Administración local. De asomarse años atrás como protagonista en el mercado inmobiliario de la capital de la Costa del Sol, al punto de asumir algunos de los más destacados proyectos en la ciudad, ha pasado a día de hoy a mantener únicamente la promoción de la Plaza del Teatro, estancada desde hace meses.
Una intervención a la que sumó, no sólo la fallida del mercado del Carmen, que tuvo que entregar a Unicaja por el impago del préstamo, sino también la construcción de pisos de lujo en la manzana de los antiguos cines Astoria y Victoria, a la que tuvo que renunciar tras la exigencia del Ayuntamiento de hacerse con estas construcciones para implantar un equipamiento cultural. La operación se cuantificó en algo más de 20 millones de euros (de los que 9,9 millones fueron abonados por el Consistorio en metálico, sumados a 11 parcelas de suelo municipales, cuatro para VPO en Parque Norte y Morillas, y otras siete para vivienda libre en Hacienda Paredes).
La decisión provocó ayer la crítica por parte del grupo de IU en la Casona del Parque. "Si esta sentencia se confirma estamos ante un hecho grave", dijo el portavoz de la coalición, Pedro Moreno Brenes, que insistió en la "necesidad de que los responsables expliquen en el Pleno exactamente qué fallos se han podido producir en la gestión de este asunto". No obstante, apoyó la decisión del equipo de gobierno de recurrir la sentencia. Por su parte, la portavoz del PSOE, María Gámez, denunció que "una vez más" vayan a ser los malagueños "los que tengan que pagar por una actuación inadecuada por parte del equipo de gobierno".
Según informaron a Málaga Hoy fuentes próximas al proyecto, la determinación adoptada en primera instancia respalda las tesis mantenida por la promotora, que incluso se vio obligado a devolver hasta tres millones de euros a los clientes que reservaron una vivienda. Ante este revés, el delegado de Ordenación del Territorio y Vivienda, Diego Maldonado, dijo respetar las decisiones judiciales, pero anunció que recurrirá el fallo.
La demanda de la que ahora se conoce el fallo fue presentada por Baensa, a la que el Consistorio compró la manzana de los antiguos cines Astoria y Victoria por unos 20 millones de euros y con la que aún negocia el abono de otros 6 millones en concepto de otros gastos, en febrero del año 2011. La firma, de origen vasco, acabó dando este paso tras ver cómo la intervención residencial que preveía levantar en Callejones del Perchel, tras adquirir el suelo a grupo Lar (con una inversión prevista de 70 millones), se vio afectada por el retraso en la demolición y traslado del antiguo mercado.
Según fuentes de la promotora, el compromiso asumido en su día por Urbanismo y grupo Lar, posteriormente asumido con Baensa, era el de facilitar este cambio de localización antes de finales de 2007, sin que ello tuviese lugar hasta hace unos meses. Esta circunstancia, según la empresa afectada, imposibilitó que el proyecto avanzase conforme a lo previsto, obligándola incluso a desvincularse de la intervención ante la incapacidad para afrontar los pagos del préstamo concedido por Unicaja para el desarrollo de la actuación.
Antes de acudir a la vía judicial, los responsables de Baensa, en marzo de 2010, presentaron un escrito de responsabilidad patrimonial por los mencionados 18,3 millones, que fue inadmitido por el gerente del organismo en junio de ese mismo año al entender que los problemas a los que alude la empresa formaban parte de "una cuestión contractual".
La sentencia, aunque no definitiva, sí puede suponer un respiro para una firma afectada de forma severa por la crisis económica y por el conflicto con la Administración local. De asomarse años atrás como protagonista en el mercado inmobiliario de la capital de la Costa del Sol, al punto de asumir algunos de los más destacados proyectos en la ciudad, ha pasado a día de hoy a mantener únicamente la promoción de la Plaza del Teatro, estancada desde hace meses.
Una intervención a la que sumó, no sólo la fallida del mercado del Carmen, que tuvo que entregar a Unicaja por el impago del préstamo, sino también la construcción de pisos de lujo en la manzana de los antiguos cines Astoria y Victoria, a la que tuvo que renunciar tras la exigencia del Ayuntamiento de hacerse con estas construcciones para implantar un equipamiento cultural. La operación se cuantificó en algo más de 20 millones de euros (de los que 9,9 millones fueron abonados por el Consistorio en metálico, sumados a 11 parcelas de suelo municipales, cuatro para VPO en Parque Norte y Morillas, y otras siete para vivienda libre en Hacienda Paredes).
La decisión provocó ayer la crítica por parte del grupo de IU en la Casona del Parque. "Si esta sentencia se confirma estamos ante un hecho grave", dijo el portavoz de la coalición, Pedro Moreno Brenes, que insistió en la "necesidad de que los responsables expliquen en el Pleno exactamente qué fallos se han podido producir en la gestión de este asunto". No obstante, apoyó la decisión del equipo de gobierno de recurrir la sentencia. Por su parte, la portavoz del PSOE, María Gámez, denunció que "una vez más" vayan a ser los malagueños "los que tengan que pagar por una actuación inadecuada por parte del equipo de gobierno".
No hay comentarios:
Publicar un comentario