viernes, 25 de enero de 2008

Junta y Ayuntamiento se culpan mutuamente del retraso en la obra de ampliación del hospital. Marbella (SUR)


El Ayuntamiento asegura que hace dos meses que otorgó el permiso para las obras, aunque mantiene el veto a la zona comercial prevista en el proyecto. El Gobierno andaluz sostiene que no hay autorización sino un informe técnico que no permite comenzarlas
Las declaraciones de Manuel Chaves, presidente de la Junta, en su última visita a la ciudad para protagonizar un mitin del PSOE, han vuelto a tensar la cuerda entre el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía. El secretario general de los socialistas acusó a la alcaldesa, Ángeles Muñoz, de bloquear y retrasar actuaciones del Gobierno andaluz y puso especial énfasis en el proyecto de ampliación del hospital Costa del Sol. «No hemos podido empezar la obra porque al Ayuntamiento no le ha dado la gana», proclamó, en alusión a la dilación de los permisos. La regidora recogió ayer el guante y entró de llenó en la pugna al afirmar que la licencia para construir un edificio de 30.000 metros cuadrados anexo al actual centro hospitalario fue aprobada el 20 de noviembre, aunque con la salvedad de que se desestimaban los 2.600 metros cuadrados de la zona comercial prevista en el proyecto «porque no entran en el planeamiento al ser suelo destinado a uso hospitalario». La mecha acababa de prender y el cruce de acusaciones, culpándose ambas administraciones mutuamente del retraso de los trabajos de ampliación, también. La delegada provincial de Salud de la Junta, María Antigua Escalera, corrigió a la alcaldesa y aseguró a este periódico que en ningún momento el Ayuntamiento ha otorgado una licencia, aunque sea parcial, para dar luz verde a los trabajos. «Lo que la alcaldesa entregó al director gerente del hospital el 20 de noviembre fue un informe técnico del arquitecto en el que se desaconsejaba la guardería y la zona comercial», señaló. Ángeles Muñoz no dice lo mismo. Sostiene que el Gobierno andaluz tiene vía libre desde el 4 de diciembre, fecha en que se subsanó un pequeño defecto de forma en un plano, y puso el acento en que el Ayuntamiento es quien tiene «máximo interés» en que se ejecuten las obras, servicios y equipamientos «que hacen falta en la ciudad». Por contra, acusó a Chaves de «faltar a la verdad» y de «deslealtad» y reveló el contenido de una conversación telefónica con la delegada provincial de Salud: «Le dije que empezaran cuanto antes y cuando quisieran».
Alegaciones
Para intentar desbloquear la situación, Escalera abundó en que la propia dirección gerencia del centro hospitalario remitió al Consistorio alegaciones a este informe técnico, instando a que se otorgara una licencia sin restricciones. «Hasta hoy -por ayer- no la han mandado», señaló. La delegada provincial de Salud defendió además la previsión de una guardería y de una zona comercial, «servicios asistenciales para los usuarios similares a los que tiene cualquier hospital».Las posturas sobre esa zona comercial siguen enfrentadas. Desde la Delegación Municipal de Urbanismo insisten en que la calificación del suelo, destinado exclusivamente a uso sanitario, es incompatible con esta parte del proyecto planteado desde la Junta al ser contrario al planeamiento. Eso en el caso de los 2.200 metros cuadrados que se destinarán al área comercial. Sobre la guardería, sí podría haber más acercamiento, ya que la propia alcaldesa anunció que presentarían alegaciones al nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para permitir este equipamiento.El conflicto viene coleando desde hace dos meses, concretamente desde el 20 de noviembre, cuando la propia regidora anunció que habían aprobado en Junta Local de Gobierno el permiso para dar luz verde a los trabajos con un pero: se quedaba fuera el área comercial y la guardería que incluía la actuación por incompatibilidad con la calificación del suelo. Acusó además a la Junta de «querer financiar» con esta fórmula las obras de ampliación, presupuestadas en 48 millones de euros.
Cafetería o prensa
El Gobierno andaluz no tardó en salir al paso. Matizó que en ningún caso está previsto abrir un centro comercial sino una serie de servicios complementarios, tales como una cafetería, establecimientos de prensa o regalos, para mejorar la asistencia a los usuarios a imagen y semejanza de otros hospitales de la categoría del de Marbella. Quiso mandar además un mensaje tranquilizador al afirmar que este contratiempo con la autorización para la obra no iba a retrasar el inicio de los trabajos. El proyecto de reforma y ampliación del hospital comarcal Costa del Sol contempla la construcción de un nuevo edificio, que se conectará con el actual y que tendrá una superficie aproximada de 30.000 metros cuadrados. Casi la mitad de su superficie se destinará al área asistencial, con 150 habitaciones individuales y varios módulos que acogerán nuevas áreas de consultas externas, quirófanos y dependencias de radiología. Albergará además tres plantas de aparcamiento con una capacidad de 1.394 plazas, una guardería para los trabajadores del centro hospitalario, una zona de galerías comerciales y una nueva cafetería. Los trabajos están encomendados a Inabensa y Constructora Hispánica, por 48,5 millones de euros, y tienen un plazo previsto de ejecución de 30 meses.

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