Piden cárcel para dos empresarios y un jefe de obra por el accidente de un trabajador (SUR)

Dos empresarios y un jefe de obra se enfrentan cada uno a un año y diez meses de prisión al considerarlos la Fiscalía responsables del accidente que sufrió un trabajador que se precipitó desde un tejado a una altura de ocho metros en noviembre de 2004 en Cártama. El obrero, que salvó la vida aunque sufrió graves lesiones, realizaba su trabajo sin equipos y medidas de seguridad idóneas para ello.

Una empresa principal era la encargada de la construcción de 141 viviendas en Cártama, aunque tenía un contrato con una compañía dedicada a instalar las medidas de seguridad y con otra que se encargaba de realizar los trabajos de colocación de tejas.

El accidente se produjo cuando el trabajador, de 37 años, estaba colocando tejas, para lo que llevaba un arnés anticaídas «aunque no estaba anclado en ningún punto fijo porque no existía 'línea de vida' ni ningún otro sistema», según el fiscal. En un momento determinado, el obrero, que no había sido provisto de calzado antideslizante, resbaló y cayó desde el lugar donde se encontraba a la plataforma del andamio.

Al golpear el listón intermedio, debido a su inconsistencia, se desprendió de sus anclajes provocando la caída del trabajador hasta el suelo. Los laterales del tejado donde se realizaba la obra se hallaban desprotegidos, ya que carecían de barandillas o mallas y el operario no había recibido formación e información sobre riesgos de los trabajos en altura.

Tres responsables

El Ministerio Público considera que el jefe de obras, designado por la empresa principal, «no exigió que se reforzasen las medidas de seguridad pese a las deficiencias» y que el responsable de la sociedad para la que trabajaba el accidentado «no le proporcionó calzado antideslizante, despreocupándose de su formación y permitiendo que realizara su labor sin comprobar si las medidas de protección garantizaban su ejecución segura». Igualmente, acusa al responsable de la empresa de prevención porque «no dispuso en el centro de las medidas necesarias para evitar la precipitación de los operarios desde los tejados».

El trabajador sufrió varios politraumatismos, traumatismo torácico, fractura de ocho costillas con derrame pleural y otras lesiones, por lo que el fiscal solicita más de 12.000 euros de indemnización.