jueves, 8 de octubre de 2009

Urbanismo da marcha atrás y no volverá a subastar dos bloques de 'asustaviejas' (Málaga Hoy)

La medida afecta a Mariscal, 3 y 5, cuyo primer intento de venta quedó desierto

S. SÁNCHEZ / MÁLAGA | ACTUALIZADO 08.10.2009 - 01:00
El Ayuntamiento de Málaga descarta volver a sacar a subasta los edificios de calle Mariscal, 3 y 5, dos fieles ejemplos de acoso inmobiliario detectados en los últimos años en el centro de la capital. Así lo confirmó ayer a este periódico el concejal de Urbanismo, Manuel Díaz Guirado, quien consideró innecesario convocar un nuevo concurso "sin tener la seguridad de que vaya a haber alguna oferta". "Si hay alguien interesado en la compra y pregunta por ello se tendrá en cuenta", comentó, al tiempo que precisó que mientras eso no ocurre se mantendrán las medidas cautelares y las órdenes de ejecución "para evitar que se deteriore el edificio como en estos años".

Medidas que, a lo largo de los últimos doce años, no han impedido que estas construcciones se hayan convertido en tristes protagonistas de lo que se ha denominado como el fenómeno de los asustaviejas. La determinación ahora anunciada por Díaz Guirado supone, además, un paso atrás en la línea de actuación que el equipo de gobierno del PP quería impulsar con estos supuestos, hasta el punto de enajenar las propiedades en las que se detectase un claro incumplimiento de la obligación de conservación.

La reacción se produce, además, más de un año después de que quedase desierta la primera subasta de Mariscal, 3 y 5, por los que se pedía una suma cercana a los 2,5 millones de euros. En este escenario de paralización, el Defensor del Ciudadano de la provincia, Francisco Gutiérrez, insiste en que los problemas en esos dos inmuebles siguen existiendo, "sin que ni el Ayuntamiento ni la Justicia hayan hecho nada para evitarlo", comenta. En este sentido, la concejala del PSOE Mariluz Reguero se quejó de la inacción municipal.

El análisis de las numerosas órdenes de actuación elevadas por el organismo municipal a la propiedad permite observar que las primeras notificaciones datan de 1997, sin que en estos doce años el resultado haya sido alentador. De hecho, en buena parte de los casos ha sido Urbanismo el que, de manera subsidiaria, ha desarrollado las tareas de reparación. En un escrito oficial, de octubre del pasado año, los responsables de Urbanismo muestran su malestar ante la alegación de la propiedad por la declaración de incumplimiento del deber de conservación. "No es de recibo que diez años después siga manifestando, una y otra vez, que su imposibilidad para proceder al decente mantenimiento de los citados inmuebles sea siempre por causas ajenas a su voluntad", sentencia, a lo que añade: "Este organismo ha constatado la más absoluta dejación de las obligaciones que le corresponde al recurrente en su calidad de propietario".

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