El alcalde considera «un error» incorporar esta demanda ciudadana a la campaña de las próximas elecciones municipales
18.01.2011 -
El río vuelve a primera línea de la política local. ::SALVADOR SALAS
El Guadalmedina sigue esta semana en primera línea informativa, después de que la pasada se diera a conocer un informe técnico sobre las posibilidades de integración del río en la ciudad. El alcalde, Francisco de la Torre, declaró ayer que no descarta ninguna solución sobre el futuro del Guadalmedina, aunque mostró de nuevo su predilección por embovedar su cauce. «Estamos abiertos a todas las alternativas, lo que nos interesa es ver un programa de trabajo que nos permita encontrar la fórmula de la participación y el consenso para llegar a la mejor solución, y si para ello hay que hacer consultas populares tipo referéndum se harán». De esta manera, De la Torre baraja llegar a aplicar ese tipo de fórmulas de participación para recabar las opiniones de los ciudadanos sobre este importante proyecto, del que recalcó que, con el embovedado, se obtendría «más utilidad».
Además, explicó que ha solicitado a la gerencia de la Fundación Ciedes, en la que las administraciones y los colectivos sociales debatirán este asunto, la elaboración de una propuesta «que nos permita tener un método de trabajo donde todo el mundo se sienta cómodo y haya situación de consenso, y si para ello es necesario tener distintos modelos, pues se tendrán. Se podría convocar también un concurso de ideas abierto o uno más concreto dentro de los distintos modelos ya consensuados, y si hace falta, se hará. Eso es lo que queremos que se vea en la Fundación Ciedes», añadió.
De la Torre indicó que está «abierto a todas las fórmulas posibles» y se mostró dispuesto a sentarse «para que me convenzan de que es mejor otra solución, aunque lo veo difícil». Defendió también que su función como presidente de la Fundación Ciedes es mantener el clima de consenso «de cara a optar por la alternativa urbanística, técnica e hidráulica más adecuada», aunque insistió en que las iniciativas que proponen crear canales en el río «se van a encontrar con unas dificultades enormes para salvar la pendiente del cauce, con más de cuarenta metros de cota entre la base de la presa de El Limonero y el mar y unos doce metros entre La Rosaleda y el mar». «No queremos que el cauce se convierta en un foso, aunque estamos abiertos a todas las soluciones que sean técnicamente viables y tener en cuenta lo que plantea el PGOU, para lo que se tendrán en cuenta los estudios elaborados por Urbanismo en el 1998». Unos estudios que cifraban el importe de estas obras en «el equivalente a unos 200 millones de euros». Precisó también que los ríos reclaman su espacio, y recordó que con el embovedado del cauce la ciudad podría contar con más «espacios verdes, no grises; jardines y fuentes que den un cambio estético».
Fechas
En opinión del primer edil es «un error» tratar de incorporar el debate sobre el futuro del Guadalmedina a la campaña electoral. «Debe ser un tema de ciudad, que compartamos todos. No sé si alguien ha buscado que los informes lleguen en estas fechas previas a los comicios municipales, nosotros no, porque lo venimos pidiendo desde hace mucho tiempo y los informes se esperaban desde hace dos años», sentenció.
«Encontrar soluciones a este problema y contribuir a la integración del río en la ciudad es realmente una ocasión histórica, por lo que hay que hablar de forma consensuada de las soluciones posibles, y si otros vetan esas soluciones, es su problema», añadió, en alusión al rechazo de la candidata del PSOE a la Alcaldía de Málaga, María Gámez, al embovedamiento.
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