La Aduana afronta su conversión en museo con dos años de retraso (La Opinión)

El próximo lunes, 25 meses después de la firma del acuerdo entre el Gobierno y la Junta para convertir el edificio en sede del Bellas Artes y Arqueológico, se presenta el proyecto arquitectónico y museístico del estudio Pardo Calvo. Los fondos artísticos llevan más de diez años embalados
Habrá desembarco ministerial, masiva presencia de autoridades y felicitaciones y parabienes. Y también mucho retraso. El lunes, a partir de las 11.15 horas de la mañana, se presentará en el palacio de La Aduana, actual sede de la Subdelegación del Gobierno, el proyecto museístico y arquitectónico para convertir el histórico inmueble en el futuro Museo de Málaga, que albergará los fondos del Bellas Artes y el Arqueológico. Dicho proyecto, realizado por el estudio madrileño Pardo Calvo, debería haber estado listo hace ocho meses, según el concurso público en el que resultó adjudicatario del contrato.Además, han pasado 25 meses desde que el Gobierno y la Junta de Andalucía firmaron el acuerdo para el uso ciudadano de La Aduana, que tuvo lugar en septiembre de 2005. Han pasado 25 meses de aquella histórica foto y de las promesas de traslado inmediato de la Subdelegación a la que será su nueva sede, La Caleta. 25 meses desde que se anunció la inminente mudanza de los funcionarios. Y lo cierto es que hasta ahora nada de eso se ha cumplido. La historia de La Aduana como museo es la historia del eterno retraso; desde que se inició el proceso, allá por 1995, la lentitud ha sido su principal característica.Los ministros de Cultura, César Antonio Molina, y Fomento, Magdalena Álvarez, presidirán el lunes la presentación del proyecto museístico y arquitectónico. También estará la consejera de Cultura de la Junta, Rosa Torres, y Ángel Pérez Mora, arquitecto malagueño corresponsable del rediseño y adecuación interior del edificio para ser museo. Fernando Pardo Calvo, la cabeza visible del estudio arquitectónico responsable del proyecto, comentó a este periódico que la intervención será "conservacionista" y de "recuperación de la imagen histórica del inmueble". En su opinión, la mayor dificultad de la conversión radica en la "necesaria conjunción de los valores intrínsecos del edificio con las instalaciones imprescindibles de un espacio museístico", en el que hay que plantear con inteligencia el movimiento de los flujos de visitantes, garantizar unas condiciones de temperatura y humedad estables y pensar en la accesibilidad y la integración con el entorno.El retraso con el que llega el proyecto se suma al de la liberación del edificio por el traslado de las dependencias de la Subdelegación a La Caleta, ya comentado. Y aún queda otro plazo irrenunciable, que es el de los trabajos. Después del lunes ya habrá luz verde para sacar a concurso público los trabajos en el interior de La Aduana. Pardo Calvo prevé unas obras "muy difíciles y delicadas", ya que no se trata de un solar: "Hay que ir con mucho cuidado para quitar lo que le sobra al inmueble. En unos 30 meses desde su inicio pueden estar acabadas las obras", dijo. En el mejor de los casos y siempre que los plazos se respeten -cosa que no ha sucedido aún en todo el largo proceso de conversión de La Aduana en espacio expositivo-, pasarán al menos tres años hasta que el Museo de Málaga abra sus puertas.Cuadros embalados. En estos momentos, los fondos pictóricos del Museo de Bellas Artes, que antes se exponían en el palacio de Buenavista (hoy Museo Picasso), llevan diez años embalados en los pisos superiores de La Aduana, esperando a que la Junta de Andalucía encuentre una localización provisional para que puedan ser expuestos a la espera de que ocupen de forma definitiva su lugar en el inmueble neoclásico del XVIII