Lluvia de ideas para la antigua cárcel (SUR)

Centro cívico, sala de exposiciones, museo de la memoria histórica... El Ayuntamiento baraja varios usos y destinos para la prisión de tercer grado, en proceso de desalojo

Fachada del edificio. / F. GONZÁLEZ

Aunque aún no hay una fecha clara para que el Ayuntamiento pueda disponer del edificio de la prisión de tercer grado -el proceso para su desalojo y traspaso puede durar varios meses todavía-, una lluvia de ideas cae sobre su destino, que ya ha empezado a ser analizado por los miembros del equipo de gobierno en el Ayuntamiento. La concejala del distrito Cruz del Humilladero, donde se ubica en la avenida de Ortega y Gasset, Teresa Porras, explicó que, por el momento, los fines que se barajan abogan por convertir la antigua cárcel en una especie de centro cívico para los barrios del entorno que mejore sus dotaciones en equipamientos sociales y culturales. Así, está prevista la realización de salas para exposiciones, locales para sede de colectivos que no la tienen aún, y espacios para jóvenes artesanos.

La intención del equipo de gobierno es que algunas de las exposiciones que se celebran en lugares como la sala de muestras del Archivo Municipal, en la Alameda Principal, y en el Museo del Patrimonio Municipal, en la plaza del General Torrijos, puedan pasar luego por la antigua prisión tras su reforma para uso ciudadano. De este modo, podrán ser disfrutadas por los vecinos de uno de los sectores más densamente poblados de Málaga.

Guerra Civil

Este uso cultural y social, que podrá completarse con una pequeña biblioteca y un amplio salón de actos para eventos, se hará compatible con un espacio expositivo dedicado a la memoria histórica de Málaga tras la Guerra Civil, como han demandado la asociación malagueña por la Recuperación de la Memoria Histórica y el grupo municipal de Izquierda Unida, que presentó una moción al respecto en el pleno municipal que fue aprobada por todos los grupos políticos.

No obstante, según matizó Porras, también podría habilitarse algún equipamiento en el antiguo cementerio de San Rafael, que quedará convertido en parque, para albergar contenidos expositivos sobre este asunto.

«Lo primero que tenemos que hacer es entrar y ver cómo está el edificio por dentro, ya que una cosa son los planos y otra la realidad», matizó la concejala, quien confió en que el traspaso efectivo del inmueble se produzca lo antes posible, una vez que el Ministerio del Interior termine el traslado de reclusos al nuevo centro de internamiento construido en una parcela del polígono Guadalhorce.

No obstante, la intención del Consistorio es llevar a cabo una transformación de la antigua cárcel de tal forma que pueda adaptarse a usos muy diversos. Así, algunas salas quedarán separadas por paneles móviles para poder ampliar o reducir espacios en función de las necesidades de cada momento.

Junto con estos usos, el Ayuntamiento trasladará al edificio las oficinas y los talleres de la sede central del departamento de Servicios Operativos, ubicada actualmente en las instalaciones de El Duende, en el camino de San Rafael. De este modo, se hace posible el empleo de los suelos de Operativos, junto a los de la Empresa Malagueña de Transportes (EMT), para la construcción de un total de 963 viviendas protegidas, distribuidas en varios bloques, así como una subestación eléctrica de 220 kilovatios en una parcela de 3.000 metros cuadrados.