Diputación ejecuta la demolición parcial por orden del juzgado.
La Diputación provincial culminará hoy el derribo de una vivienda ubicada en el kilómetro 8 la carretera MA-3201 de Benaque, en Macharaviaya, por orden del juzgado número 4 de Málaga. Se trata de una casa de apero que el propietario ha ampliado como vivienda, ubicada en la zona de dominio público de la carretera.
Los trabajos, que comenzaron ayer y finalizarán hoy, afectan sólo a la zona de ampliación por lo que se deberá restituir la edificación en su estado original. El propietario correrá a cargo de los gastos del derribo que ascienden a unos 12.000 euros. Además, ha tenido que pagar una sanción de 1.800 euros.
El alcalde de Macharaviaya, Antonio Campos, ha confirmado que en el año 2000 se le denegó la licencia de obra para construir la casa de aperos. A pesar de ello el propietario realizó la construcción por lo que le abrió un expediente sancionador y se le ordenó la paralización de la obra. «Finalmente la vía administrativa no siguió adelante porque un vecino denunció la situación en el juzgado», ha explicado Campos.
Distancia mínima
La primera denuncia de este vecino se remonta al año 2001, y fue presentada ante la Delegación de Urbanismo de la Junta de Andalucía. En ella asegura que según la ley debe haber una distancia mínima de 25 metros desde la carretera hasta la vivienda, que además carece de saneamiento, agua y electricidad. También ha presentado denuncias ante la Diputación provincial en 2003, y ante el Ayuntamiento de Macharaviaya.
Gena-Ecologistas en Acción también denunció la invasión del dominio público de la carretera por parte de esta vivienda ante la Fiscalía de Medio Ambiente de la Audiencia Provincial y la Delegación Provincial de Obras Públicas. «Creemos que se debería ejecutar la demolición de toda la edificación, y no sólo de una parte, porque es ilegal, y así lo vamos a exigir ante el juzgado», ha asegurado el coordinador de Gena, Rafael Yus.
Aún así los ecologistas han mostrado su satisfacción porque se trata de la primera «demolición real» que se lleva a cabo en la comarca de la Axarquía. Yus ha asegurado que en el caso de Macharaviaya existen unas 30 viviendas ilegales porque están construidas en suelo rústico no urbanizable.
El propietario de la vivienda en cuestión, Salvador Fuentes, ha asegurado que el vecino que ha presentado las denuncias le ha hecho la vida imposible. «Me ha denunciado por coger almendras y por tener un perro», ha lamentado Fuentes, quien ha afirmado que lleva cuatro años pagando la contribución de la casa.
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