domingo, 9 de diciembre de 2007

El hotel imposible. Nerja (SUR)


El Molino de Papel, el lugar elegido por los empresarios de Nerja para hacer un centro hotelero, invade una vía pecuaria que la Junta pretende despejar
EL Paraje Natural de Maro-Cerro Gordo siempre está en pleno debate. La Junta está pendiente de aprobar el Plan de Ordenación y Recursos Naturales (PORN). En las alegaciones, la Asociación de Empresarios de Nerja planteó la posibilidad de aprovechar la infraestructura del Molino de Papel, ubicado dentro del espacio natural, para hacer un hotel vinculado a actividades subacuáticas en los fondos marinos.La administración autonómica rechazó de plano tal pretensión argumentando normativas municipales, autonómicas, estatales y europeas. De forma silenciosa, otra actuación afecta de lleno a este inmueble propiedad de la Sociedad Azucarera Larios (SALSA). La Consejería de Medio Ambiente inició en abril pasado un expediente de deslinde de la vía pecuaria 'Cañada Real de Motril a Málaga', que afecta de lleno al Molino de Papel.
Recuperar las vías
Según el delegado de Medio Ambiente de la Junta, Ignacio Trillo, «prácticamente la totalidad [del Molino de Papel] está dentro de la vía pecuaria». Y la intención del departamento que dirige Trillo es recuperar las vías pecuarias dentro de un plan provincial en fase de realización. «La prioridad está en los espacios protegidos», como es el caso.La vía pecuaria 'Cañada Real de Motril a Málaga' tiene una longitud de 15.500 metros y una anchura legal de 75,22 metros dentro del término municipal de Nerja. No está clara la parte del Molino de Papel que invade la cañada. Lo que sí es patente es la intención del delegado de Medio Ambiente de que todo lo que invada la vía pecuaria deje de hacerlo. O lo que es lo mismo, que desaparezca, aunque nadie quiere hablar de demolición. Trillo apunta la posibilidad de «permuta de bienes en el paraje por otros de la administración».El deslinde de esta vía pecuaria viene de lejos. La Junta de Andalucía comenzó a mover ficha allá por julio de 2003, cuando se aprueba el deslinde. En su momento, se presentaron 17 alegaciones, entre ellas la de la Sociedad Azucarera Larios.La empresa de la familia Larios, propietaria del inmueble, sostuvo entonces que «no existe fondo documental que acredite las operaciones de clasificación de vías pecuarias» y consideró «excesiva la anchura legal establecida para realizar las labores de deslinde».
Batalla judicial
La administración autonómica esgrime que tal clasificación de vía pecuaria quedó establecida en una Orden Ministerial que data del 4 de marzo de 1971. Sin acuerdo entre las partes, la Sociedad Azucarera Larios interpuso un recurso de alzada en 2003 contra la aprobación del deslinde de la vía pecuaria. Éste fue desestimado. Así que la empresa familiar apeló a un recurso ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJA.Según el delegado de Medio Ambiente, «las vías pecuarias no prescriben, son dominio público y prevalecen sobre la propiedad privada». La intención de Medio Ambiente es que, una vez que esté despejada la vía pecuaria, ésta se convierta en ruta de senderismo, para paseos a caballo o para uso ganadero. Consultada en reiteradas ocasiones, SALSA dio la callada por respuesta.El Molino de Papel fue construido en el siglo XVIII, durante el reinado de Carlos III, por Manuel Centurión Guerrero de Torres, que fue gobernador general de la Guayana. Al regresar de América, Carlos III le encomendó varios proyectos de fábricas de papel en Reino de Granada. La de Nerja comenzó a funcionar en 1.800 como fábrica de papel de tina. Tres siglos después, este edificio está pendiente de una vía pecuaria.

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