El edil de Urbanismo dice que su departamento estudia si el proyecto es técnicamente viable
El equipo de gobierno del Ayuntamiento (PSOE, IU y GIPMTM) está estudiando qué usos dar a la finca Monterrey, 143.466 metros cuadrados de superficie adquiridos por el Consistorio en 2005 que hasta la fecha no han tenido ninguna utilidad. La finca, calificada como rústica en el PGOU del municipio, fue adquirida durante el mandato del ex alcalde socialista, Antonio Souvirón, para la construcción de más de 220 viviendas para jóvenes, aunque el proyecto no pudo prosperar al rechazar la Comisión Provincial de Urbanismo la recalificación de los terrenos. El Ayuntamiento invirtió en la compra de este suelo, ubicado junto a la carretera de Arenas, alrededor de 1,2 millones de euros.
Desde la concejalía de Urbanismo, el edil responsable del área ha propuesto al equipo de gobierno la posibilidad de destinar la finca a la realización de un complejo turístico dedicado al mundo del caballo, dada la gran afición que existen en el municipio a este tipo de animales.
Viabilidad
Según Marín, aunque de momento se trata sólo de una idea que está siendo valorada por su departamento con el objetivo de ver hasta que punto es viable técnicamente, el complejo vendría a resolver las dificultades a las que se enfrentan los propietarios de este tipo de animales equinos para disponer de una cuadra en la que cuidar y atender adecuadamente a sus caballos.
El edil ha manifestado en rueda de prensa que la finca dispone de espacio más que suficiente para destinar una parte a la celebración de ferias, exhibiciones, domas y otras actividades propias del mundo del caballo; una segunda a parcelas en las que mediante concesión administrativa los propietarios puedan contar con su propia cuadra, y una tercera, más de tipo hotelero ,en la que se reservaría espacio para un hotel rural y una posada con cuadras para el cuidado de los animales.
La Comisión Provincial de Ordenación del Territorio y Urbanismo de la Junta de Andalucía denegó en 2007 al Ayuntamiento la recalificación urbanística de la finca Monterrey para la construcción de viviendas de protección pública, abortando así el proyecto de construcción de 220 viviendas para jóvenes.
Calificación
La finca Monterrey está clasificada como suelo no urbanizable de protección especial y calificada como espacio de Potencialidad Forestal en el actual PGOU vigente.
La recalificación de la finca se basó en la aplicación de las normas urbanísticas imperantes en la Comunidad Autónoma y para impedir sobre los crecimiento armónicos de las ciudades y para impedir la creación de unidades aisladas. Los terrenos se encuentran en un sector relativamente alejado del casco urbano.
Asimismo, la Comisión Provincial consideró que todavía quedaban en el municipio terrenos urbanizables programados y casi todo el suelo no programado por desarrollar, espacios en los que resultaban viables las viviendas para jóvenes sin necesidad de realizar ninguna recalificación.
La Comisión valoró también los problemas del acceso al sector desde la carretera de Arenas y un informe de la Agencia Andaluza del Agua sobre la no existencia de recursos suficientes para satisfacer las nuevas demandas.
El equipo de gobierno del Ayuntamiento (PSOE, IU y GIPMTM) está estudiando qué usos dar a la finca Monterrey, 143.466 metros cuadrados de superficie adquiridos por el Consistorio en 2005 que hasta la fecha no han tenido ninguna utilidad. La finca, calificada como rústica en el PGOU del municipio, fue adquirida durante el mandato del ex alcalde socialista, Antonio Souvirón, para la construcción de más de 220 viviendas para jóvenes, aunque el proyecto no pudo prosperar al rechazar la Comisión Provincial de Urbanismo la recalificación de los terrenos. El Ayuntamiento invirtió en la compra de este suelo, ubicado junto a la carretera de Arenas, alrededor de 1,2 millones de euros.
Desde la concejalía de Urbanismo, el edil responsable del área ha propuesto al equipo de gobierno la posibilidad de destinar la finca a la realización de un complejo turístico dedicado al mundo del caballo, dada la gran afición que existen en el municipio a este tipo de animales.
Viabilidad
Según Marín, aunque de momento se trata sólo de una idea que está siendo valorada por su departamento con el objetivo de ver hasta que punto es viable técnicamente, el complejo vendría a resolver las dificultades a las que se enfrentan los propietarios de este tipo de animales equinos para disponer de una cuadra en la que cuidar y atender adecuadamente a sus caballos.
El edil ha manifestado en rueda de prensa que la finca dispone de espacio más que suficiente para destinar una parte a la celebración de ferias, exhibiciones, domas y otras actividades propias del mundo del caballo; una segunda a parcelas en las que mediante concesión administrativa los propietarios puedan contar con su propia cuadra, y una tercera, más de tipo hotelero ,en la que se reservaría espacio para un hotel rural y una posada con cuadras para el cuidado de los animales.
La Comisión Provincial de Ordenación del Territorio y Urbanismo de la Junta de Andalucía denegó en 2007 al Ayuntamiento la recalificación urbanística de la finca Monterrey para la construcción de viviendas de protección pública, abortando así el proyecto de construcción de 220 viviendas para jóvenes.
Calificación
La finca Monterrey está clasificada como suelo no urbanizable de protección especial y calificada como espacio de Potencialidad Forestal en el actual PGOU vigente.
La recalificación de la finca se basó en la aplicación de las normas urbanísticas imperantes en la Comunidad Autónoma y para impedir sobre los crecimiento armónicos de las ciudades y para impedir la creación de unidades aisladas. Los terrenos se encuentran en un sector relativamente alejado del casco urbano.
Asimismo, la Comisión Provincial consideró que todavía quedaban en el municipio terrenos urbanizables programados y casi todo el suelo no programado por desarrollar, espacios en los que resultaban viables las viviendas para jóvenes sin necesidad de realizar ninguna recalificación.
La Comisión valoró también los problemas del acceso al sector desde la carretera de Arenas y un informe de la Agencia Andaluza del Agua sobre la no existencia de recursos suficientes para satisfacer las nuevas demandas.
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