El sector registra el mayor retroceso en dos décadas y cierra el ejercicio con 14.304 casas visadas, un 51% menos que en 2007 Los arquitectos proyectan tres veces menos pisos que hace dos años
Los profesionales del sector lo esperaban, pero verlo plasmado en las tablas impresiona. Los efectos de la crisis en el mercado inmobiliario se hacen notar con mayúsculas en las estadísticas de los proyectos de viviendas que son revisados y aprobados por el Colegio Oficial de Arquitectos. El balance de 2008, que ayer fue dado a conocer por esta entidad, revela que la construcción de pisos ha caído un 51,3% en la provincia durante el último año al pasar de 29.432 casas visadas durante 2007 a un total de 14.304 durante 2008.
Los números dejan clara la más que complicada situación por la que atraviesa el sector de la construcción. Hay que retrotraerse hasta el año 1991, cuando el número de viviendas visadas cayó un 50,5% en la provincia para encontrar un panorama similar. De hecho, la cifra de las aprobadas durante 2008 se asemeja a las 13.279 que fueron iniciadas en el año 1997, cuando el mercado se encontraba aún en una situación de tímido despegue tras la crisis de mediados de los noventa.
Reserva
Además, el dato de 14.304 viviendas visadas hay que tomarlo más que nunca con cierta precaución, ya que se trata de hogares aún en proyecto que reciben el visto bueno del Colegio de Arquitectos antes de obtener la preceptiva licencia de obras en los ayuntamientos, por lo que puede que sus promotores opten por no iniciarlos en este momento y dejarlos para meses o años posteriores.
No obstante, los visados ofrecen una imagen fiable de la salud de la economía inmobiliaria. En ese sentido, destaca el hecho de que ahora se proyecten en Málaga tres veces menos casas que hace sólo dos años, cuando 2006 cerró con un balance de 45.661 pisos autorizados por los arquitectos.
La caída se acentúa fundamentalmente en la capital y en algunos de los principales municipios de la costa occidental. En Málaga, las 6.329 viviendas visadas a lo largo de 2007 se convierten en 2.442 para 2008, lo que supone un retroceso del 61,4%. Un porcentaje similar de bajada se produce en Estepona -localidad que se ha visto condicionada por la sombra de la corrupción urbanística- y en Benalmádena, donde los hogares visados se reducen en un 74%.
La palma en cuanto a decrecimientos se la lleva el municipio de Mijas. Después de tres años en los que se proyectaron más de cuatro mil viviendas para este territorio de la Costa del Sol, la cifra de visados no alcanzó los tres mil en 2007 y ha descendido hasta el medio millar en 2008.
Marbella
Por su parte, Marbella arroja una bajada en la construcción de casas del 27%, la menor caída de cuantas se detectan en el litoral oeste. Esto se debe a que la especial situación política y urbanística de esta localidad ya había reducido los niveles de planificación de pisos en años anteriores. Los 619 visados en 2008 para la ciudad marbellí distan mucho de los 8.718 que se aprobaron en 2002.
Con todo, algunas zonas de la Costa arrojan un saldo positivo en su evolución durante el año que acaba de finalizar, si bien sus cifras de producción de casas no superan el millar. Son los casos de Torremolinos, con un crecimiento del 21% y Manilva, donde el mercado aumenta un 52%, al pasar de 208 viviendas visadas durante 2007 a un total de 316.
Costa oriental
Las localidades de la costa oriental no se libran del desplome del ladrillo pese a que algunas de ellas, como Vélez-Málaga, han atravesado recientemente por un momento de expansión residencial. Es el caso de Torrox, donde el porcentaje de reducción roza el 70%, y de Rincón de la Victoria, con un decrecimiento del 52,3%.
Aunque en un volumen de proyectos residenciales sensiblemente inferior al litoral malagueño, el interior de la provincia experimenta una caída algo menor que se sitúa en el 40% en términos generales. Sólo se libran de esta situación Ronda, donde los visados aumentan en un 32% y Archidona, donde crecen un 17%. En el resto de municipios, el balance es negativo, sobre todo en Cártama y Alhaurín El Grande, para los que se han proyectado un 60% menos de hogares en el último año.
El único segmento residencial con motivos para cierto optimismo es el de las viviendas de protección oficial, que incrementa su peso en el conjunto del mercado inmobiliario de la provincia, aunque tímidamente. Si en 2007 las VPO representaron el 6,3% de las casas visadas, en 2008 ese porcentaje se eleva al 9,5%. No obstante, dista bastante del 30% que quiere alcanzar el Gobierno andaluz en los próximos meses.
Los profesionales del sector lo esperaban, pero verlo plasmado en las tablas impresiona. Los efectos de la crisis en el mercado inmobiliario se hacen notar con mayúsculas en las estadísticas de los proyectos de viviendas que son revisados y aprobados por el Colegio Oficial de Arquitectos. El balance de 2008, que ayer fue dado a conocer por esta entidad, revela que la construcción de pisos ha caído un 51,3% en la provincia durante el último año al pasar de 29.432 casas visadas durante 2007 a un total de 14.304 durante 2008.
Los números dejan clara la más que complicada situación por la que atraviesa el sector de la construcción. Hay que retrotraerse hasta el año 1991, cuando el número de viviendas visadas cayó un 50,5% en la provincia para encontrar un panorama similar. De hecho, la cifra de las aprobadas durante 2008 se asemeja a las 13.279 que fueron iniciadas en el año 1997, cuando el mercado se encontraba aún en una situación de tímido despegue tras la crisis de mediados de los noventa.
Reserva
Además, el dato de 14.304 viviendas visadas hay que tomarlo más que nunca con cierta precaución, ya que se trata de hogares aún en proyecto que reciben el visto bueno del Colegio de Arquitectos antes de obtener la preceptiva licencia de obras en los ayuntamientos, por lo que puede que sus promotores opten por no iniciarlos en este momento y dejarlos para meses o años posteriores.
No obstante, los visados ofrecen una imagen fiable de la salud de la economía inmobiliaria. En ese sentido, destaca el hecho de que ahora se proyecten en Málaga tres veces menos casas que hace sólo dos años, cuando 2006 cerró con un balance de 45.661 pisos autorizados por los arquitectos.
La caída se acentúa fundamentalmente en la capital y en algunos de los principales municipios de la costa occidental. En Málaga, las 6.329 viviendas visadas a lo largo de 2007 se convierten en 2.442 para 2008, lo que supone un retroceso del 61,4%. Un porcentaje similar de bajada se produce en Estepona -localidad que se ha visto condicionada por la sombra de la corrupción urbanística- y en Benalmádena, donde los hogares visados se reducen en un 74%.
La palma en cuanto a decrecimientos se la lleva el municipio de Mijas. Después de tres años en los que se proyectaron más de cuatro mil viviendas para este territorio de la Costa del Sol, la cifra de visados no alcanzó los tres mil en 2007 y ha descendido hasta el medio millar en 2008.
Marbella
Por su parte, Marbella arroja una bajada en la construcción de casas del 27%, la menor caída de cuantas se detectan en el litoral oeste. Esto se debe a que la especial situación política y urbanística de esta localidad ya había reducido los niveles de planificación de pisos en años anteriores. Los 619 visados en 2008 para la ciudad marbellí distan mucho de los 8.718 que se aprobaron en 2002.
Con todo, algunas zonas de la Costa arrojan un saldo positivo en su evolución durante el año que acaba de finalizar, si bien sus cifras de producción de casas no superan el millar. Son los casos de Torremolinos, con un crecimiento del 21% y Manilva, donde el mercado aumenta un 52%, al pasar de 208 viviendas visadas durante 2007 a un total de 316.
Costa oriental
Las localidades de la costa oriental no se libran del desplome del ladrillo pese a que algunas de ellas, como Vélez-Málaga, han atravesado recientemente por un momento de expansión residencial. Es el caso de Torrox, donde el porcentaje de reducción roza el 70%, y de Rincón de la Victoria, con un decrecimiento del 52,3%.
Aunque en un volumen de proyectos residenciales sensiblemente inferior al litoral malagueño, el interior de la provincia experimenta una caída algo menor que se sitúa en el 40% en términos generales. Sólo se libran de esta situación Ronda, donde los visados aumentan en un 32% y Archidona, donde crecen un 17%. En el resto de municipios, el balance es negativo, sobre todo en Cártama y Alhaurín El Grande, para los que se han proyectado un 60% menos de hogares en el último año.
El único segmento residencial con motivos para cierto optimismo es el de las viviendas de protección oficial, que incrementa su peso en el conjunto del mercado inmobiliario de la provincia, aunque tímidamente. Si en 2007 las VPO representaron el 6,3% de las casas visadas, en 2008 ese porcentaje se eleva al 9,5%. No obstante, dista bastante del 30% que quiere alcanzar el Gobierno andaluz en los próximos meses.
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