Dice que el Ayuntamiento cedió los terrenos «bajo la presión de la dictadura» de Primo de Rivera
El alcalde de Málaga no da por pérdida la batalla legal y política por recuperar para la ciudad las 28 hectáreas del Campamento Benítez. Después de que una reciente sentencia de la Audiencia Nacional dejase claro que la titularidad corresponde al Estado, Francisco de la Torre apela a la memoria histórica y a la revisión de los acuerdos tomados en los años veinte del pasado siglo, durante la dictadura de Miguel Primo de Rivera, para que la propiedad de los terrenos vuelva a la ciudad.
De la Torre recordó que el pleno municipal de julio de 1924 acordó comprar los terrenos a Guillermo Heredia para cederlos al Ministerio de la Guerra como sede de la Brigada de Reserva del Ejército de África, a condición de que cuando dejase de tener uso militar, la propiedad revirtiera en la ciudad. En una sesión de mayo de 1925 y a petición del ministerio, el pleno acuerda que la cesión sea en pleno dominio y sin causa de reversión alguna. En este punto, el regidor subrayó que esta decisión se tomó «bajo la presión de una dictadura militar» y consideró que al igual que se hace una reflexión sobre los acuerdos adoptados en la dictadura de Franco, también debe hacerse sobre las disposiciones de los años veinte «que fueron igualmente de carencia de libertades».
«La no mención de la necesidad de reversión es porque se ve que están haciendo las obras, pero la voluntad y el espíritu del Ayuntamiento es claramente que se había comprado para que tuviera un objetivo militar y cuando lo dejase de tener se revirtiesen los terrenos a la ciudad», dijo, al tiempo que recordó que el margen de libertad de los ayuntamientos de aquella época era «escaso».
Recurso ante el Supremo
En una comparecencia junto al libro de actas en los que se recogen ambos acuerdos, el alcalde reiteró que el Ayuntamiento continuará en la defensa de «los derechos históricos y jurídicos de la ciudad» y señaló que ya se ha presentado un recurso ante el Tribunal Supremo contra la sentencia de la Audiencia Nacional en base al silencio administrativo después de que el Gobierno central no respondiese a la petición de reversión de los terrenos. Si en esta vía no obtienen una respuesta satisfactoria seguirán pleiteando con los argumentos de la memoria histórica, adelantó el primer edil.
De la Torre dejó claro que la petición de los terrenos no supondrán el retraso ni la puesta en cuestión del Museo del Transporte que el Ministerio de Fomento plantea en este suelo.
El alcalde de Málaga no da por pérdida la batalla legal y política por recuperar para la ciudad las 28 hectáreas del Campamento Benítez. Después de que una reciente sentencia de la Audiencia Nacional dejase claro que la titularidad corresponde al Estado, Francisco de la Torre apela a la memoria histórica y a la revisión de los acuerdos tomados en los años veinte del pasado siglo, durante la dictadura de Miguel Primo de Rivera, para que la propiedad de los terrenos vuelva a la ciudad.
De la Torre recordó que el pleno municipal de julio de 1924 acordó comprar los terrenos a Guillermo Heredia para cederlos al Ministerio de la Guerra como sede de la Brigada de Reserva del Ejército de África, a condición de que cuando dejase de tener uso militar, la propiedad revirtiera en la ciudad. En una sesión de mayo de 1925 y a petición del ministerio, el pleno acuerda que la cesión sea en pleno dominio y sin causa de reversión alguna. En este punto, el regidor subrayó que esta decisión se tomó «bajo la presión de una dictadura militar» y consideró que al igual que se hace una reflexión sobre los acuerdos adoptados en la dictadura de Franco, también debe hacerse sobre las disposiciones de los años veinte «que fueron igualmente de carencia de libertades».
«La no mención de la necesidad de reversión es porque se ve que están haciendo las obras, pero la voluntad y el espíritu del Ayuntamiento es claramente que se había comprado para que tuviera un objetivo militar y cuando lo dejase de tener se revirtiesen los terrenos a la ciudad», dijo, al tiempo que recordó que el margen de libertad de los ayuntamientos de aquella época era «escaso».
Recurso ante el Supremo
En una comparecencia junto al libro de actas en los que se recogen ambos acuerdos, el alcalde reiteró que el Ayuntamiento continuará en la defensa de «los derechos históricos y jurídicos de la ciudad» y señaló que ya se ha presentado un recurso ante el Tribunal Supremo contra la sentencia de la Audiencia Nacional en base al silencio administrativo después de que el Gobierno central no respondiese a la petición de reversión de los terrenos. Si en esta vía no obtienen una respuesta satisfactoria seguirán pleiteando con los argumentos de la memoria histórica, adelantó el primer edil.
De la Torre dejó claro que la petición de los terrenos no supondrán el retraso ni la puesta en cuestión del Museo del Transporte que el Ministerio de Fomento plantea en este suelo.
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