El alcalde de Ronda, Antonio Marín, ha defendido que actuó dentro de la legalidad al aprobar la construcción de la urbanización de los Merinos, que proyecta la edificación de 800 chalés de lujo, dos campos de golf y tres hoteles de lujo en una finca en el término municipal de la ciudad del Tajo y próxima a Cuevas del Becerro.
Marín justificó su actuación en los informes favorables técnicos: «Los Merinos es un proyecto legal ya que fue aprobado por la Junta cuando se aprobó el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Ronda en 1993», dijo el regidor rondeño, que declaró ayer ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Ronda como imputado por un supuesto delito medioambiental, contra la ordenación del territorio y presunta prevaricación tras una denuncia presentada por Izquierda Unida (IU) en 2007.
Así, Marín declaró que conocía la existencia de informes negativos en cuanto a los recursos hídricos, pero autorizó el proyecto mediante decreto ya que los técnicos municipales así se lo indicaron, concretamente el jefe de servicios jurídicos y el arquitecto.
El alcalde de Ronda, que ya ha pedido el archivo de la denuncia, manifestó que se querellará contra el portavoz de IU, Rafael Ruiz, y el dirigente provincial de la formación, José Antonio Castro, «por politizar y hacerle el juego sucio a los ecologistas, que son sus compañeros de viaje y han perdido todo en los tribunales».
Por su parte Ruiz dijo que Marín no ha defendido la legalidad del proyecto, sino que basó su defensa en informes técnicos.
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