El Plan General de Ordenación Urbana de Marbella estará aprobado definitivamente antes del 26 de febrero de 2010. Éste es el último compromiso adquirido por la Junta de Andalucía, tras meses de desconcierto y baile de plazos.
En julio, el Gobierno local del PP aprobó por segunda vez provisionalmente y en solitario el nuevo planeamiento. Desde entonces, la ´pelota´ se suponía sobre el tejado del Gobierno autonómico. Parece que no era así.
La Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio recibió ayer el documento completo, informó la institución andaluza mediante nota de prensa. Por tanto, el cronómetro que marca la recta final para la entrada en vigor del nuevo PGOU no se encendió hasta ayer. Y el plazo legal con el que cuenta la Junta para tramitarlo y emitir el informe necesario para su aprobación final es de cinco meses, se advierte.
Compromiso. En la práctica, será menos. El consejero de Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Espadas, acelerará "al máximo" los plazos de tramitación. "Es un compromiso reiterado y adquirido públicamente", recuerda la Junta. Traducida la aceleración al calendario, los cinco meses serán dos y medio. Eso sí, "siempre y cuando la documentación remitida esté correcta", apostilla la nota.
Los técnicos deberán estudiar el expediente remitido por el Ayuntamiento y los distintos informes sectoriales elaborados por las delegaciones autonómicas de Cultura y Medio Ambiente y las nacionales de Costas y Carreteras para comprobar si son favorables y si cumplen con las normativas vigentes.
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