El redactor del PGOU olvida llevar al plano su criterio sobre las lindes. Marbella (SUR)

El documento urbanístico fija los mismos límites del Institito Cartográfico en la zona de Benahavís, pero marca unos diferentes en Ojén y Mijas

Dirigentes socialistas con vecinos del núcleo urbano. / JOSELE-LANZA

La memoria de participación del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Marbella establece como referencia para fijar los límites entre este municipio y las localidades colindantes los mapas del Instituto de Cartografía de Andalucía. Sin embargo, los planos del nuevo documento no dicen lo mismo. Sólo en el caso de las lindes entre Marbella y Benahavís, concretamente en la zona conocida como 'Cerro del Colorao', el equipo redactor del Plan ha tomado como guía las líneas marcadas por el órgano cartográfico andaluz. Por el contrario, los límites del término municipal con respecto a Ojén, Istán y Mijas no coinciden con estos criterios.

El caso de Ojén es el más significativo, puesto que los mapas del PGOU reflejan incluso los acuerdos alcanzados entre los ayuntamientos de ambas localidades respecto a sus lindes. El documento urbanístico dibuja el reparto equitativo llevado a cabo entre ambas administraciones hace menos de un año sobre el casi medio centenar de hectáreas de suelo en litigio entre las localidades desde hacía más de un siglo. Así, recoge en el término municipal de Marbella la zona de La Mina en la que se proyecta la construcción de un gran centro medioambiental o sitúa la totalidad de la residencia del cantante Julio Iglesias dentro de los límites de Ojén.

Planos

Tanto estos planos, como los referentes a los lindes de Marbella con Istán y Mijas, según ha comprobado este periódico, no se amoldan a las pautas del Instituto de Cartografía de Andalucía, defendidas en el texto remitido por los redactores del Plan al Ayuntamiento de Marbella de cara a su segunda aprobación provisional. El error de concordancia, según han asegurado a SUR distintas fuentes, constituye un olvido por parte del equipo dirigido por el arquitecto jerezano Manuel González Fustegueras, que no ha plasmado en los mapas los principios establecidos por escrito en el documento.

Sólo la cartografía que traza los lindes entre Marbella y Benahavís concuerda con los principios establecidos en el PGOU. Y únicamente en la zona de 'Cerro Colorado', objeto de polémica debido a que el expediente de deslinde iniciado entre ambos municipios afectaría a terrenos que son propiedad de sociedades gestionadas por familiares de la alcaldesa marbellí, Ángeles Muñoz, e, incluso, a su actual residencia.

Sobre este aspecto, el equipo redactor mantiene los límites del Instituto de Cartografía de Andalucía, sitúa estos terrenos en Marbella e insta a las dos localidades a acogerse a un Plan de Ordenación Intermunicipal (POI) para edificar en la zona según el planeamiento urbanístico de Benahavís. Este conflicto, sin embargo, podría resolverse pronto. Según ha podido saber este periódico, el Gobierno autonómico y el Ayuntamiento de marbellí han alcanzado un acuerdo para solicitar al Consejo Consultivo de Andalucía un informe sobre el deslinde que serviría para zanjar la cuestión de forma definitiva.