A partir del lunes sólo podrán entrar al casco antiguo de Málaga unos cuatro mil vehículos autorizados
Habrá aparcamientos y vía libre para motos y bicicletas
Ya no hay vuelta atrás. Desde el próximo lunes, día 29, ya no se podrá circular por el interior del Centro Histórico salvo que su vehículo sea uno de los casi 4.000 que han sido autorizados. Un sistema automático de pivotes, apoyado con cámaras de vídeo, impedirá que entren los coches -sí podrán hacerlo las motos y bicicletas-. De esta forma, el Ayuntamiento de Málaga, como los de otras ciudades españolas, pretende proteger el casco antiguo que, en el caso malagueño, tiene forma de almendra.
Entre los 4.000 vehículos que han obtenido permiso para penetrar en la zona restringida se encuentran 1.400 taxis, casi 500 vehículos de carga y descarga, más de un millar de coches oficiales y de servicios públicos (operativos, limpieza, policías, bomberos, etcétera), los de personas con movilidad reducida y un número sin determinar de residentes. No obstante, la previsión apunta a que una vez que el sistema entre en funcionamiento aumente el número de peticionarios.
El concejal de Movilidad, Juan Ramón Casero, y el director del Área de Tráfico, José Gordo, mostraron ayer a los periodistas el sistema de bolardos automáticos, junto a técnicos municipales y de la empresa Monelec, que es la que gestiona este complejo proyecto, valorado en 645.000 euros.
Las cinco entradas principales a la 'almendra' quedan bloqueadas para el tráfico habitual y sólo se franqueará el paso a los vehículos que estén autorizados previamente. Una de las entradas se encuentra en al principio de la calle Císter, a la altura de la plaza de la Aduana.
Las cinco entradas
Esta es la única que no tiene bolardo con el fin de permitir el acceso urgente al Sanatorio Gálvez. No obstante, habrá un semáforo en rojo -como en las demás entradas- y el conductor debe tocar el interfono e informar de que se dirige al centro hospitalario para que, desde control, lo pongan en verde y pueda acceder.
El vehículo que entre por este punto recorrerá Císter, San Agustín, Duque de la Victoria, plaza del Siglo y Molina Lario. Aquí, en la confluencia con Cortina del Muelle, hay un pivote automático que se bajará cuando la cámara de vídeo lea la matrícula del vehículo autorizado.
La segunda entrada está situada en la confluencia de Molina Lario con Sancha de Lara, a la altura del hotel Molina Lario. Los vehículos que por aquí entren deberán salir por calle Martínez hacia Puerta del Mar, donde, al igual que en todos los puntos, habrá también un pivote automático a la salida.
Otra de las entradas está en la confluencia del pasillo de Santa Isabel con Cisneros. Por otra parte, se ha cambiado el sentido de la circulación en la calle Nosquera para permitir entrar en esta vía directamente desde Carretería. Aquí también hay otro pivote automático. El itinerario que pueden hacer los coches que por aquí entren es Comedia, Tejón y Rodríguez y salir de nuevo a Carretería, a la altura de Ollerías.
Y el quinto bolardo de sube y baja está ubicado en la calle Méndez Núñez, en la confluencia con la calle Comedias. Así, los vehículos que entren desde Álamos hacia la Puerta de Buenaventura y plaza del Teatro podrán acceder directamente al aparcamiento de Tejón y Rodríguez sin encontrar obstáculos que lo impida. Sí tendrán que pasar por ese pivote los vehículos que se dirijan al parking privado de la calle Granados. La salida de este itinerario será por la calle Casapalma. El concejal de Movilidad advirtió de que no se va a permitir que los vehículos esperen en la peatonal calle Granados a que haya plaza libre en el aparcamiento para entrar. Sólo se franqueará el paso si el aparcamiento tiene plaza sin ocupar. La capacidad de este parking es de 46 plazas.
El casco antiguo, con una extensión de 40 hectáreas, tiene un censo de población de entre 6.000 y 7.000 habitantes. Se suprimen todas las plazas de estacionamiento en superficie -en el perímetro hay 276 para residentes-. Sin embargo, sí hay zonas de aparcamientos para motos y bicicletas, que tendrán vía libre para entrar y salir de la 'almendra'.
En cada entrada y salida hay dos cámaras de vídeo -una por delante y otra por detrás del pivote-, cuya imágenes se visionan en el Centro de Control de Tráfico del Ayuntamiento, que está en la avenida de Andalucía. Habrá un servicio 24 horas los 365 días del año para atender el interfono.
Juan Ramón Casero aseguró que en el primer mes no habrá sanción económica a los infractores, un tiempo de gracia para que todos se acostumbren a este sistema, que empezará a funcionar a las ocho de la mañana del próximo lunes. En feria y Semana Santa no funcionará.
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